Capítulo 4

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Me desperté, desayuné y bajé a la urba ( como cualquier sábado o domingo ).
Estaba charlando ( sobre que les está pareciendo la selectividad ) con unas amigas de la urba: Lucía y Rocío ( de unos 17 ) cuando bajaron los pesados de la urba: Antonio, Patricia, Rodolfo, Inés, Juan, Luis, Pepe y Bartolo; que empezaron a jugar al indio al agua y a molestarnos ( como no :/ ).

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Esa misma tarde...

- Hola Claudia, ¡ qué bien has podido venir ! Porque no te veo desde hace dos años; porque te fuiste a Irlanda, ¿ no ? - dije.

- Hola Ana , sí, me fui a Irlanda dos años pero durante este mes me quedo en España porque ya me aburre estar en Irlanda - dijo Claudia.

Fuimos a mi casa, nos cambiamos y bajamos a la piscina; donde estaban los plastas de la urba ( no los voy a volver a nombrar :|) empezamos a dar volteretas, pinos... en fin cosas que solo se me dan bien en el agua porque en tierra...; de verdad soy penosa deberías de ver mis notas de gimnasia os daría un ataque al corazón ( suficientes y bienes :/ ); pero había una niña que iba a mi clase de educación física y era impresionante.
Bueno voy al grano, Claudia se trajo a su novio irlandés llamado Peter que resultó ser amigo de mi novio Sandía ( es un apodo que le ponemos mis amigas y yo ), bueno que... al final se quedaron un poco más de lo previsto pero va no pasa nada porque vino otra amiga y su novio ( Isabel e Iván ) que conocían a Claudia de patinaje de cuando eran pequeñas.

- ¡ Heeey ! Hola, cuanto tiempo ¿ no ? No nos vemos desde que te fuiste de patinaje - dijo Isa.

- Hola, sí, ya es que me estuve aplicando más a los estudios y casi no tenía tiempo para mis hobies: natación, patinaje ( como ya sabes ), etc. - dijo Claudia.

- Bueno..., si no os importa os tenéis que ir ya. Me lo acaban de decir mis padres. Pero ya que estabais hablando de vuestras cosas os podéis ir a un bar, a un restaurante a cenar o a picar algo. Bueno haced lo que queráis menos quedaros ( siento estar tan borde ) - dije.

- No, no pasa nada ya nos veremos. Chao - dijo Isa.

- Chao - dijeron.

- Chao, espero poder veros pronto - dije.

Después de que se fueran; Lucía, Rocío y Marta ( otra amiga de la urba )me llamaron al telefonillo para ver si bajaba, pero las dije que no, porque estaba demasiado cansada y que me iba a ir a la cama. Así que chao.

Nada es ImposibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora