Eran las 7:30 de la mañana y Taehyung llegaba tarde a su colegio.
-ABUELA, YA ME VOY- sin más, dio un portazo.
Corriendo como si su vida dependiera de eso. En realidad así era, nunca llegó tarde. Se durmió de tanto que estuvo ayudando en la cafetería de la señora.
-Buen día. ¿Me puede decir la hora? Por favor- dijo asomándose a la puerta de la cafetería.
-7:40, hijo
-Bueno, gracias- hagarrando la bolsa de panes que le dio la señora comenzó su carrera otra vez.
Oh, no, no y no
El portón del colegio estaba cerrado.
-¿Y ahora?.¿Que hago?- me senté debajo de un árbol que había cerca.
Vi un auto que se acercaba al colegio, se veía caro, muy caro, extrañado lo miré y bajan un señor de traje y un chico, puede que tenga mi edad, se me hizo un poco familiar verlo de espaldas.
Cansado me acomode el cabello. Estaba echo un asco, lo tenia largo y como venia corriendo sude y se pegó por mi frente. No presté atención a los que estaban en el auto y me dirigí para la salida.
Ha lo lejos veo dos perros corriendo. ¿Divinen que?, Yeontan y BamBam.-otra vez no, por favor- dije mirando el cielo
...-Buen día, otra vez
-ay, hijo, parece que no estás teniendo un buen comienzo de semana
-No, se ve que no- dije poniéndome un delantal para ir a tomar pedidos
Ya eran las 12:30 del mediodía y estábamos cerrando.
-Disculpe, no hay más atención al cliente hasta mañana, pero... ¿que necesita?- dije cuando vi un pie que hizo que no cerrarse la puerta
Empujando la puerta, entró.
Ash odiaba las personas así.
-Un café simple, sin mucha azúcar
-Claro, enseguida le traigo- medio extrañado me dirigí para la cocina. Ya había visto a ese señor.
Oh, era el de la escuela y el auto caro. ¿Los ricos siempre son tan insoportables?
Cuando le entregue su pedido ni gracias dijo, le hubiera tirado sobre su pelada.
-Gracias señor, que tenga buen día- dije con ironía.
Le dije a la señora que podía irse a su casa, que yo iba a cerrar la cafetería.
Me dijo que podía llevar algunas facturas y elegí unas con una crema amarilla, riquísimas.
Me senté afuera de la cafetería a comer, con Yeontan y BamBam al lado.
-¿Saben?, estas son las favoritas de mamá- dije un poco cabizbajo
Yeontan me vio como si entendiera lo que dije
Con ellos acompañándome, me dirigí hacia la casa de mamá. Quería verla, deseaba verla aunque sea desde lejos, pero ella no quería que yo este ahí, no quería que su estúpido esposo me viera.
Me dieron ganas de llorar al recordar todo lo que viví en esa casa con mi madre.
Di de comer a Yeontan y BamBam, para, así, irme a la casa de mi abuela.
...
-hijo. ¿Ya comiste?
- No abuela- No le iba a decir que comí dulce en vez de una buena comida
Me sirvió un plato de arroz con carne. Como amaba la comida de la abuela.
-¿Que tal te fue en el colegio?
No sabía que responder
-Abuela... no eh ido- Sentí su mirada en mi nuca, no sabia si quedarme o salir de ahí- !PERO¡, antes de que te enojes...
-¿Que?
-Llegué tarde, fue por eso
Pude escuchar como ella suspiraba, parecía cansada o... preocupada.
-Mi niño, te ando notando un poco perdido y cansado. ¿Estas bien?, ¿Te está pasando algo?
OK. Me esperaba todo menos eso. ¿Que se supone que respondiera?
-Abuela, tu sabes que estoy bien, es solo que...ando teniendo el sueño pesado por eso.
GENIAL, la respuesta más tonta que he dicho y sin sentido
Pero ¿Que le diría?. No abuela, no estoy bien, tengo miedo de que mi mamá muera maltratada en ese basurero con el estúpido de su esposo. NO. Ella también está mal por su hija
Puta Madre, el nudo en el estómago otra vez.
-Bueno, hijo, voy a descansar un rato- Me dijo mientras subía las escaleras.
Al fin pude sacar todo el aire que tenia en mis pulmones.
Me encerré en mi habitación un rato, no podía dormir, miré el reloj. 14:30 de la tarde, solo podía escuchar el tik tak del reloj y mi cabeza que no dejaba de pensar.
-No, por favor- dije cuando me entraron recuerdos de mi madre- Cálmate, respira, y concéntrate en algo para describirlo.
Dije para mi mismo. No quería sobrepensar otra vez pero mi cabeza no colaboraba
Sin darme cuenta, las lágrimas comenzaron a brotar y mojar mis mejillas. Me las sequé en un movimiento torpe y brusco.
Sentándome en mi cama, abrí el cajón de mi mesa de luz y saqué de ahí una navaja que me había regalado mi padre.
Sin pensarlo dos veces la pasé con fuerza sobre mi muñeca. Una, dos, tres veces hasta que mi cabeza se callara.
-Lo siento- dije viendo el techo
Pude dormir tranquilo después de eso. No pensé que dormiría tanto, pero bueno, creo que lo necesitaba.
Como todas las tardes, mi abuela estaba centada en su sofá viendo alguna novela mientras tejía.
-Hijo, te hice una chocolatada y te compré unas galletitas para que comas- Me dijo sin apartar la mirada del televisor.
-Gracias- por algún motivo me levante pensando en el chico del auto en la escuela, y, el de la cafetería. ¿Será el mismo? No lo pude reconocer bien.
25/06/24
Puede que sean cortos los capítulos, los voy a hacer más largos

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En otra vida
Fiksi PenggemarKim Taehuyung un chico de 15 años con problemas familiares, quien haría lo posible por sacar a su madre de las garras de su padrastro, conoce a Jeon Jungkook un chico de 17 años que va a su escuela. ¿Que pasaría si se enamoran? ¿Y si Jungkook trata...