AMOR TRIPARTITA (DazaixAkutagawaxAtsushi)

EPÍLOGO

Akutagawa y Atsushi habían ido a una cita. Fueron de compras obviamente con dinero del mafioso, y comieron casi en cada puesto de comida rápida que encontraban. Atsushi era la definición de felicidad en persona. Caminaba por las calles de la ciudad vestidos con ropas casuales para no llamar la atención de quienes pudieran reconocer a Akutagawa. Compraban ropa, comida, accesorios, detalles, comida, víveres, chucherías, comida, dulces y caramelos, cosas a juego, comida etc.

Cerca de Minato Mirai, Kunikida y Dazai habían salido a pasear luego del trabajo para divertirse. Se subieron a una rueda de la fortuna y por petición de Dazai más tarde fueron a Sanrio Puroland. Por supuesto a Kunikida no le importaba asistir y hacer cosas ridículas porque lo motivaba el castaño. Cuando fue a recogerlo a su casa le había llevado unas flores al moreno y desde entonces andaba muy contento.

Habían salido de una cafetería con temática de gatos un par de tortolos: Ranpo y Fukuzawa. Al parecer Fukuzawa quería ir desde hace mucho pero no sabía como convencer al menor. Entonces éste dedujo lo que su pareja anhelaba. Ambos amaron el lugar y sobre todo un pequeño felino tricolor que no se les despegaba. Luego comieron unas crepas y Fukuzawa le compró dulces al tierno Ranpo. Para muchos parecían padre e hijo.

Las tres parejas muy felices iban, esperaban cada una disfrutar de aquel día que iba siendo tan placentero. Hasta que en un crucero muy concurrido se toparon cara a cara cada uno de estos muchachos.

–¿Ranpo-san y Fukuzawa-san? –preguntó el peliblanco

–Es raro verte sin tu abrigo Akutagawa-kun –dijo Dazai interrumpiendo totalmente

–Ya no hace falta que nos ayudes a disimular Dazai –dijo el mayor de todos

–¿Entonces eso significa que ustedes...? –preguntaba Kunikida

–¡Así es! Somos novios y si nos disculpan nos gustaría ir a hacer cosas de novios –dijo Ranpo con cierto hartazgo por ser interrumpido y descubierto en su cita. Tomó del brazo al mayor y terminó de cruzar la calle dirigiéndose hacia un Love hotel. Mientras los demás miraban sorprendidos

–¿Dazai, tú sabías?

–Le prometí a Ranpo-san luego de arruinarle su ánimo no decir nada

–Me lo esperaba –dijo Akutagawa– el hombre encaja con la descripción que me dio el detective la otra vez

–Bueno dado que nos hemos encontrado nosotros... ¿podríamos ir a una cita doble?

Todos miraron al albino.

–Lo siento Atsushi-kun, no me interesa ni el voyerismo ni el exhibicionismo así que iré con Kunikida-kun a estrenar un regalito y como sólo es para él no quiero que se metan –dijo poniendo la mirada que solía tener en la mafia

Todos entendieron el mensaje y Atsushi sólo se puso rojo.

–¿Te interesan los juegos? –preguntó Akutagawa

–¡No! –se adelantó mientras su novio reía a sus espaldas.

Todos se habían ido a sus respectivos lugares de encuentro amoroso. Y disfrutarían de la cita que cada uno había planeado. Les esperaba un futuro próspero mientras no se envolvieran en los dramas personales.

.
.
Es hora de decir adiós a esta historia. Espero que hayan disfrutado porque habrán notado que el tono fue cambiando conforme avanzaban los capítulos ya que me daba incomodidad pues se me ocurrió un inicio pero fue difícil dirigir esto hacia un final. Nos vemos en otras historias y no olviden seguirme para ver mis actualizaciones bye bye y gracias por leer