Wouldn't it be nice?

Where we belong

La tarde del sábado llegó lentamente. Martin y Ruslana estaban tirados en el sofá, cada uno a un extremo de este. Tenían la tele puesta de fondo mientras estaban con el móvil.

“Estoy tan aburrida. Encima me siento tan soltera.” Se quejó la chica. Chiara había quedado con otra chica para cenar esa noche. Hasta se había comprado un vestido nuevo para la ocasión. “Ojalá vaya mal.” Martin despegó sus ojos del móvil para mirar a su amiga. Se preguntaba si eran celos o simplemente se aburría.

“Qué mala amiga, ¿no?” Esquivó el cojín que le había tirado.

“Calla que tú también te fuiste de cita el otro día.”

“No fue una cita.” Miró hacia otro lado para esconder su nerviosismo. Cuando pensó que era seguro mirar de nuevo miró al frente, Ruslana le estaba mirando fijamente con una ceja elevada como diciendo que no se lo creía ni un poquito. “Que no, joder.” Insistió.

“Bueno, pero te hubiera gustado que lo fuese.” Iba a defenderse cuando le interrumpió. “Ahórrate la saliva si piensas mentirme y decirme que no es verdad.”

Martin suspiró y volvió a centrar su atención en su móvil. Empezó a mirar historias hasta que llegó a la de Denna que había subido una foto anunciando su actuación de la noche. “Mierda, se me había olvidado.”

“¿Qué pasa? ”

“Denna me había invitado a un bar porque toca esta noche.”

“¿Perdona?” Inmediatamente se levantó del sofá y se tiró encima del chico. “Venga levanta el culo que nos vamos de fiesta.”

“No es una fiesta.”

Se levantó de nuevo para tirar de él. “Vamos. Muévete.”

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“¡Martin! Qué alegría qué estés aquí.” Denna les sonrió al acercarse a ellos.

Se abrazaron para saludarse. “Esta es mi amiga Ruslana.”

La pelirroja le dio dos besos a la rubia. “Hola, encantada.”

“Igualmente. Me encanta tu outfit, por cierto.” Se giró hacia donde estaba un pequeño escenario. “Bueno vamos a empezar en nada.”

“¿Y tu amigo?”

Denna rio. “Siempre llega justísimo, debe estar a punto de llegar. Si queréis id cogiendo sitio que las mesas luego se llenan.”

“Suerte.” Dijeron a la vez. Anduvo hacia una de las mesas que estaba libre y se sentó mientras Ruslana les pedía unas bebidas.

“Marchando dos margaritas.”

“Uf, no sé si me apetece beber.”

“Esto casi no sube. Pero si quieres te pido otra cosa.” Martin negó y le dio un sorbo a la bebida.“¿Sabes si está soltera?” Ruslana miraba a Denna que estaba colocando los micros.

“¿Has venido solo a ligar o qué?” Se rieron. “Encima parece hetero.”

“Un poco sí.” Justo en ese instante se fijó que había otra persona en el escenario. Estaba dándoles las espalda. Cualquier otra persona sería incapaz de saber quién era solo viendo esa parte de su cuerpo. Pero Martin había perdido ya la cuenta de las veces que se había quedado embobado mirando la espalda de Juanjo.

“Joder.” Se puso nervioso cuando confirmó que sí era él.

“¿A tí qué te pasa ahora?” Ruslana siguió la dirección de su mirada. “Hostia. ¿Seguro que no sabías que venía? Es todo un poco sospechoso.”