¿Y si tu artista favorito se cruzara frente a tí un día totalmente al azar? A nadie le pasó eso, a Edgar sí; y no sabe ni cómo ni cuando sucedió tal cosa, que cambiaría su adolescencia para siempre. Solo sabe que sus emociones van más allá del arte...
En el plan bastante acosador y psicópata que había armado Draco, sorprendentemente funcionó.
Él pensaba cualquier tipo de posibilidades antes de hacer lo que había idealizado.
Una de las cosas era que Collete sospechara gracias al ruido y lo detectara en pleno acto
Tampoco descartaba que algún cliente lo hubiese visto, o el mismísimo Griff.
Por suerte, eso no pasó. Draco no era muy planificativo a la hora de hacer las cosas, tiene un espíritu impulsivo que se deja llevar por lo que se le ocurre en el momento. Creo que sabemos que eso puede salir muy mal.
Aunque, tuvo suerte.
Allí estaba, absorto en su computadora, viendo que la cámara que había colocado funcionaba a la perfección. Podía ver absolutamente todo desde el ángulo del ojo del osito.
Como Collete atendía clientes, Griff gritándole a casi todo el mundo, etcétera. Se sentía como el mismísimo Dios que podía verlo todo.
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(Espero que se note que está azul porque le está dando el brillo de la pantalla de la computadora, me tuve que aprender la teoría del color para hacer ese dibujo ;-;)
No se sentía para nada arrepentido de lo que estaba haciendo, al contrario, se sentía demasiado orgulloso de que su plan hubiese funcionado a la perfección. No aguantaba la duda en su mente de lo que hacía Edgar, o de lo que hablaba, ahora lo podría ver con sus propios ojos... o mejor dicho, los del peluche.
Lamentaba un poco haber tomado la confianza de Collete y traicionarla de esa forma, pero él sentía una necesidad enorme de saber absolutamente todas las interacciones que tenía Edgar en la tienda, todo lo que decía, todo lo que hacía y mucho más. Quizá en persona no parecía, pero el rockero era extremadamente posesivo y obsesionado cuando una persona se le mete a la cabeza.
Parecía estar todo normal en la tienda, no tenía mucho incentivo de seguir viendo la cámara si Edgar aún no había llegado a trabajar. Esperó unos cuantos minutos, hasta que su pequeño finalmente apareció. Se entusiasmó tanto que puso su espalda recta de tan mala postura que estaba teniendo.
(E)-"Hola, Collete."
(C)-"Holaa. Adivina quién vino hoy"
Draco estaba atento escuchando la conversación a través de la computadora, le pareció muy curioso que Collete le fuera a decir de entrada que había ido a la tienda.
Esperemos que no le diga mucho más.
(E)-"¿Quién?" Cabe recalcar que Edgar no se sentía muy anímico ni vivo por el insomnio, mencionado anteriormente, y porque también se había puesto a sobrepensar la razón por la cual Draco le había cortado la llamada la noche anterior.
