Desde pequeños, aquel hijo del gran ultraman, y la hija del ayudante de este, se habían vuelto los peores enemigos que podrías imaginar.
El odio entre ellos dos era cada vez más palpable. Pero, un accidente causo que cambiaran de parecer, odiandose...
-¿Hace cuanto no duermes? -.Pregunto Ken mientras saliamos de haber dejado a Emi en su tanque para que durmiera.
-Hace unos... -.Trate de contar los días-.No, ya no recuerdo.
Note su mirada preocupada, y sonrei para tratar de calmarlo, algo que no funciono tanto, pero dio resultados.
-Mañana iré a una entrevista, le pediré a Mina que cuide de Emi y tu podrías aprovechar para dormir las horas que te hacen falta.
-Te lo agradecería mucho -.Dije alegre, la sola sensación de dormir todo el día me llenaba de alegría el corazón, una risa escapo de sus labios, y los dos reimos.
Hasta que nos quedamos callados, un silencio, no incomodo, sino casi acogedor.
-Lamento haberte arrastrado conmigo en esto -.Su voz sonaba como un susurro derrotado y arrepentido.
-Te pude haber rechazado, pero no lo hice, asumi las posibles consecuencias y las acepte -.No era cierto, pero no quería verlo triste.
-Pero te despidieron -.¿Habia revisado mi correo?
-Me pagaban miserias, en realidad -.Le di un leve golpe en el hombro que no tenia lesionado para alivianar sus nervios.
-¿Entonces fui tu salvación?
-Tú también me pagas miserias -.Y los dos reimos, aunque quería reclamarle todo mi dinero, pero lo haría en unos días.
Los dos empezamos a caminar, y no se como, pero las horas se fueron, llegando a la madrugada, habíamos dado la vuelta por la ciudad.
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-Estas más feliz que de costumbre, Ken -.La voz de Ami me desconcentro de mi comida, sonrei recordando a mis dos nenas, Emi y Ely.
-Digamos que hay unas personas que alegran mucho mi vida -.Tome un pedazo de comida, aunque me quede helado cuando escuche sus palabras.
-¿Cómo esa chica con la que te vieron ayer?
El pánico invadió mi corazón, y voltee a verla, dejando caer los palillos al lado de mi plato.
-Algunos periodistas les tomaron fotos, logre hacer que no las subieran e hicieran un escandalo -.Con una voz calmada, volvió a comer, como si no me hubiera dado un ataque al corazón hace un minuto.
-Bien, por que ella y yo no somos nada -.Recalque enojado, volviendo a comer. No es que odiaría a Ely, pero no podia hacer que mi carrera de béisbolista se fuera al carajo gracias a ella.
-Por como reían ayer parecía que había algo más -.Volvi a atragantarme con la comida, suspirando cansado y frotando mis ojos.
-Solo era una platica para desahogarme, ¿si? No tengo nada que ver con ella, me cae mal -.Tuve que mentir, pero mi corazón dolia levemente por eso.
-Eh... Ken -.Murmuro Ami, aunque la ignore.
-Es una idiota, orgullosa y amargada que solo adora el dinero, nunca podria ser amigo de alguien como Eleanor, ni siquiera amar a alguien así -.Quería parar, pero parecía que las palabras salian de la nada.
