𝟯: 𝗗𝘂𝗿𝗺𝗶𝗲𝗻𝗱𝗼

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(...)

Las noches solitarias podían llegar a ser abrumadoras, y mas como la gente parecida a Fang, que solía pasar noches de insomnio sobrepensando.

Pero en esta noche en particular, el gran corazón de Buster estaba ahí, para darle paz y tranquilidad a su querido novio.

Fang Intentaba acomodarse, ninguna postura le parecía cómoda, y Buster estaba ahí, observando todo con risa, risa que era silenciada para no molestar a su novio.

El peliazul emitía sonidos, los cuales eran muy graciosos para el de lentes. Este cubría su boca con la mano, riendo internamente, su novio se veía muy gracioso.

Sabía que Fang aún no conciliaba el sueño, asi que si se reía, no interrumpía el sueño del asiático.

Lo único que interrumpía era el proceso de sueño de su terroncito de azúcar, el cual estaba conciente que su novio se estaba burlando de el.

Un tic se hacía presente en su ojo, con el ceño fruncido, dándole la espalda a su novio, el cual intentaba abrazarlo.

Claro, pese a la muestra de afecto que Buster Intentaba dar, aún se reía. Sus risas iban siendo disimuladas.

Iba pasando los minutos y Fang aún no podía dormir, y al notar los pequeños suspiros que emitía Buster, podía deducir que este tampoco.

—Oye...— Llamó somnoliento, mirando a el rostro de su novio con ironía, este no se quitaba los lentes ni cuando se iba a dormir.

—¿Mhh?—Respondió, algo adormilado. Había pasado un buen rato y Buster ya empezaba a sentir sueño.

—Abrazame.— Fang se acercó más a Buster, abrazándolo por la espalda y deleitándose con el olor tan rico que su novio emitía. Buster olía a palomitas acarameladas, uno de los olores favoritos de Fang.

Y no es que huela asi en el mal sentido, su olor parecía ser el de una colonia. Líquidos que el asiático amaba ponerse.

Buster asintió al sentir la tranquilidad de Fang, dándose la vuelta y envolviendo a Fang en sus fuertes brazos
—Te amo, tontin.— Murmuró, cerrando sus ojos

(...)


𝟯𝟬 𝗗𝗶́𝗮𝘀 𝗢𝗧𝗣 | 𝗕𝘂𝘀𝘁𝗮𝗻𝗴Donde viven las historias. Descúbrelo ahora