Arresto domiciliario, no era la ni la mejor ni la peor decisión que pudo haber tomado el juez, después de un corto juicio en el que aclararon que únicamente esperarían a recabar más información del caso y de los demás sospechosos antes de declarar a uno como culpable.
Pero había sido lo mejor que Ben, su abogado, había logrado conseguir, al menos estaría en casa y no en una celda provisional.
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Aunque sin poder salir, sin poder ir a la clínica a ver a David, sin poder comunicarse con nadie que no fuera su abogado, sin saber de los avances del caso por sus colegas. Michael estaba desesperado.
Al menos su abogado podía mantenerlo al tanto, y la situación no pintaba bien. Mucho menos cuando Ben llegó a su casa esa mañana con el rostro serio y no parecía traer buenas noticias.
—¿Qué ocurre?— preguntó Michael angustiado luego de hacer pasar a Ben y cerrar la puerta de nuevo, mirando el exterior, esperando pronto poder salir de casa.
—Es sobre la sospechosa, Danna Thomas, parece que ella no está para nada cuerda, para nada...—
—¿Pasó algo? ¿Dijo algo?—
—Es una persona con ciertos problemas mentales, sé que eso lo sabes, pero... ella ha estado diciendo ciertas declaraciones que marean a la policía, la vi hoy, no dejaba de decir que ella lo hizo, pero claramente no se puede saber si es en serio, no viniendo de una persona como ella, los oficiales se miraban entre ellos tan confundidos...—
—Ni siquiera yo estoy seguro de si pudo haber sido ella, pero sé que yo no lo hice y aun así estoy con esta maldita cosa.— dijo Michael señalando su tobillo donde llevaba puesto un dispositivo de Arresto Domiciliario que servía para localizarlo.
—Estaba allí sentada en la comisaria diciendo esas cosas mientras esperaba su audiencia, al parecer también le darán arresto domiciliario hasta que el caso se resuelva.—
—Estoy cansado de todo esto.—
—Lo sé y lamento traer malas noticias, pero vine a decirte que es posible que cierren el caso y si es así tendrás una audiencia con el Juez, parece que la policía también piensa que tú lo hiciste.—
—Espera ¿Estás hablando en serio? La oficina, mis colegas...—
—Hay otros que piensan que tú y el jardinero lo hicieron en conjunto, se dicen muchas cosas.—
—No puedo creerlo ¿Qué demonios se supone que haré?—
—Defenderte hasta el final.—
—Estoy agotado de intentar defenderme.—
—No te rindas, Michael. La investigación continua.—
Se acomodó en el sillón y cubrió su rostro con las palmas de sus manos, la frustración lo superaba y no encontraba forma de ver las cosas con calma o de no rendirse.
—¿Tan mal está todo para mí?—
—Dos personas más declararon que te vieron junto a David en el patio de la residencia antes de dejar la fiesta, y lamento informarte que no hay nuevas evidencias en contra del jardinero, la pala que golpeo a David no tiene huellas ni ningún otro tipo de ADN de ninguno de los sospechosos.—
—Dices que es probable que me culpen por ese maldito video donde salgo hacia mi auto.—
—Por eso estoy aquí, debemos discutir tu defensa, estar preparados para lo que pueda pasar.—
—De acuerdo, supongo que así son las cosas, demonios.—
Michael se puso de pie y fue camino al baño a lavarse el rostro, no soportaba tanta presión y angustia, además de saber que su único amigo en el mundo no se encontraba para nada bien y no podía ir a verlo, lo mataba mentalmente afrontar tanto.
—¡Maldita sea! ¿Por qué no me puede decir nada?— Ellie estaba furiosa, apenas había llegado a la clínica, había encontrado la entrada de la habitación con dos oficiales que no la dejaban pasar y no le decían que ocurría, se sentía angustiada y era inevitable pensar lo peor.
Un médico salió de la habitación y al verla se acercó a ella.
—Despertó.—
—¿Qué? Espere.... ¿Está bien? ¿Por qué no puedo verlo?— Ellie preguntaba angustiada y ansiosa por poder verlo.
—Créame, preferiría que esté con usted que con los oficiales, esperan alguna respuesta o información del hombre que acaba de regresar del coma. El oficial Tennant aún está delicado y está muy confundido, no está para que le hagan preguntas, ni siquiera ha hablado aún, solo mira el techo con confusión, es lo normal sentirse así al despertar luego de varios días en coma, pero ellos insisten con hacerle preguntas.—
—No puedo creerlo, esto es indignante.—
—Lo sé, ya pronto podrá verlo.—
El médico se fue y lo primero que se le ocurrió hacer a Ellie fue llamar al abogado de Michael para decirle la noticia.
En casa de Michael, Ben contestó el teléfono y luego de algunos minutos miró a Michael fijamente para decirle lo que tanto quería oír.
