Se preparó mentalmente cuando el timbre de su casa sonó.
Ayer había quedado con Reo que cuidaría a su hija, verdaderamente no pensó en lo que dijo solo quería que el chico consiguiera el trabajo y esta fue la consecuencia que obtuvo
Abrió la puerta y se encontró con los dos. Reo se veía realmente bien con la ropa que llevaba puesta que hasta no pudo evitar sonrojarse, ahora fijándose en la bebé en brazos estaba linda.
Pero no más que el padre.
— ¡Buenos días Nagi! — Sonrió.
— Buenos días... — Se rascó la nuca.
Se quedaron mirándose por un par de segundos hasta que el balbuceo de la pequeña se escuchó. Reo salió del trance con un pequeño sonrojo en sus mejillas, tenía una pañalera en los hombros que se supone que deberían ser las cosas de la niña.
— ¡Ah...! Bueno aquí están sus cosas — Le paso la pañalera. — Y aquí tienes la lista, por favor cuídala bien porque si le pasa algo... — No sabe porque pero el aire se puso tenso y sintió un escalofrío.
— Te mato. — Su expresión daba miedo así que solo le quedó asentir.
Reo le paso a la bebé la cual lo miro raro al estar en sus brazos, él solo pudo sonreír para no darle miedo o bueno intento.
— Nori pórtate bien ¿Si? Regresare pronto. — Se acercó y dio un beso en una de las mejillas de la bebé.
Entonces no supo porqué pero el Omega salió corriendo, el solo se quedó en blanco pero al ver la expresión de la bebé entendió porque.
— Babi...? — Sus ojitos empezaron a aguarse — ¡WAAAAAAAAAAA! —
Ay no...
La había podido calmar después de varios minutos. Si se preguntan cómo lo hizo pues le tuvo que poner popoyo en su teléfono; tomó esa medida debido a que eso era lo que sus padres le ponían cuando lloraba así que supuso que funcionaria.
ESTÁS LEYENDO
¿Mi que? ¿Destinando? \ Nagireo
RomanceReo es un Omega divorciado con una pequeña a cargo. Nagi es un Alfa oficinista vago, cansado de su trabajo. Los dos son tienen vidas y mentes diferentes pero que pasará cuando se encuentren? Y AUN PEOR ¿¡QUE PASARÁ CUANDO SEPAN QUE SON DESTINADOS!?