Único capítulo.

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Esté ship sacado de la cola, pero gracias Fandom gringo por mostrarme esta joya de ship.


Las manos de Oscar sudaban mucho, y la tela de la camisa se pegaba a su cuerpo por el sudor que recorría por su abdomen, el aire acondicionado del auto parecía no estar funcionando, y eso molestaba mucho al Omega. Una cosa era sudar por una carrera y otra cosas era sudar por los nervios, los dos daban asco pero sudar por los nervios era peor.


No lograba concentrarse en nada, los autos y la calles de Madrid le causaban más nerviosismo. Lo encerrado del carro y su nerviosismo lo estaban matando lentamente y dolorosamente, y con ella se unía la ansiedad. —Oscar...—, llamó una voz con un acento raro a su lado. Oscar inclinó la cabeza a un lado y se encontró con un perfil atractivo de un alpha. —Koala, respira por favor. Todo estará bien—, dijo y Oscar soltó el aire que estaba conteniendo y que no sabía que estaba reteniendo.


—Carlos, ¿Y si no les agradó? ¿Si tú papá me odia? ¿O tu mamá o tu hermana?...¡Dios Esto fue una mala idea!.. —Un toque en la parte de arriba del muslo de Oscar lo interrumpió. El Omega miró hacia abajo y miró la mano de Carlos tocar su muslo, que acariciaba su pierna con delicadeza por sobre la tela de los pantalones corto de Oscar, el contacto de Carlos lo tranquilizó y su aroma un poco picante lo ayudó.


El Omega descanso su cabeza en el asiento del co-piloto y se inclinó a un lado mirando de nuevo a Carlos, que tenía los ojos puesto en la carreta y la otra mano yacía en el volante del carro. —Le agradaras, Oscar. Mi mamá es fan de McLaren, de ti y Blanca igual, te adoran y eso que no te conocen. Mi padre ya lo has visto en el paddok y no es tan gruñón como se mira. Es amable... —El alpha se detuvo en el semáforo y aprovechó para buscar la mano de Oscar y tomarla, entrelazando sus dedos, Carlos se llevó la mano del Omega a sus labios y dejó un beso en los nudillos. —Y ellos saben que somos parejas—, culminó.


El semáforo paso de estar en rojo, amarillo y después verde. El alpha comenzó a conducir. La mano de Oscar seguía entrelazada con la de Carlos y al alpha no parecía importarle, conducía con una sola mano.


—Pero no estamos enlazados ¿Y si piensan que me estoy aprovechando de ti?—, dijo Oscar, con una tono de preocupación.


Carlos le estaba presentando a sus padres sin estar marcados y muchos menos sin comprometerse, la familia de Carlos parecía un familia muy tradicional y muy estricta. Y si no le agradaba por eso, pensarían que el sólo se está aprovechando de su hijo.


El alpha se rió y alzó una ceja.


—¿Lo haces?—, preguntó en un tono divertido.


El Omega se deshizo del agarré y cruzo los brazos, mirando por la ventana. Oscar le susurró que era un idiota, el alpha sonrió pero no dijo nada, pasaron dos minutos y Carlos detuvo el carro. Oscar volvió a mirar a Carlos y esté sólo se inclinó para delante tomando la barbilla de Oscar y besando los labios del contrario. —Ellos no pensarán eso, Koala—. Carlos respondió contra los labios de Oscar. El Omega pasó la mano derecha por un costado del cuerpo de Carlos y lo llevó a la nuca del alpha, enredandos algunos mechones de la parte posterior de la nuca del alpha en sus finos y delicados dedos.


El alpha continúo—Y sobre el enlace, será..hum..no se, eso es tu decisión— terminó de decir.

Koala / CarcarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora