Capítulo 19

168 14 0
                                    

Capítulo 19: La última batalla. 

El campo de batalla estaba cubierto de cenizas y escombros, testigos de las feroces luchas que habían tenido lugar. En medio del caos, los shinobi de la Alianza se preparaban para la confrontación final. Madara Uchiha, revivido por el Edo Tensei, se alzaba imponente, su poder era abrumador y su presencia inspiraba temor incluso en los corazones más valientes.

Kakashi, Sasuke, Hinata, Naruto y Sakura estaban en la vanguardia, listos para enfrentarse al legendario Uchiha. A su alrededor, los ninjas de la Alianza Shinobi se reunían, decididos a luchar hasta el final.

—No podemos dejar que Madara gane. El destino del mundo está en nuestras manos —dijo Naruto, su voz llena de determinación mientras el chakra de Kurama irradiaba a su alrededor.

—Naruto tiene razón. Debemos unir nuestras fuerzas y atacar juntos —añadió Kakashi, su mirada fija en Madara.

Madara observó a los ninjas reunidos frente a él y esbozó una sonrisa fría. —Así que este es el poder de la Alianza Shinobi. Muy bien, demostraré la verdadera fuerza de un Uchiha.

Con un movimiento de su mano, Madara desató una ola de poder que hizo temblar el suelo. Su Susanoo, completamente formado, se alzó, creando una barrera casi impenetrable.

—¡Hinata, usa tu Byakugan para encontrar puntos débiles! —ordenó Sasuke mientras activaba su propio Susanoo.

Hinata asintió y activó su Byakugan, escaneando la estructura del Susanoo de Madara. —Hay puntos débiles en las articulaciones y en el chakra que lo sostiene. Si atacamos esos puntos, podemos desestabilizarlo.

Naruto, transformado en Modo Kurama, cargó hacia Madara con un Rasengan masivo. Al mismo tiempo, Sasuke lanzó una serie de flechas de Amaterasu, dirigiéndolas a los puntos débiles señalados por Hinata. Sakura, utilizando su Fuerza de Cien Sellos, concentró su poder en un golpe devastador dirigido al Susanoo.

—¡Ahora! —gritó Kakashi mientras utilizaba su Kamui para distorsionar el espacio alrededor de Madara y debilitar sus defensas.

El ataque combinado logró desestabilizar el Susanoo de Madara, creando una apertura. Hinata, aprovechando la oportunidad, se lanzó hacia adelante con su Juuken, golpeando los puntos de chakra de Madara con precisión.

—¡Juukenpou Ichigekishin! —exclamó Hinata, sus ataques desactivando parte del poder de Madara.

Madara, sorprendido por la coordinación y la fuerza del ataque, retrocedió momentáneamente. Sin embargo, su expresión no mostraba miedo, sino un creciente respeto por sus oponentes.

—Impresionante. Pero no será suficiente —dijo Madara antes de desatar una ráfaga de meteoritos desde el cielo.

Los ninjas de la Alianza se movilizaron rápidamente. Gaara y Onoki, utilizando sus habilidades de control de arena y polvo, crearon barreras para proteger a las fuerzas aliadas. Mientras tanto, Naruto y Sasuke se lanzaron hacia los meteoritos, destruyéndolos con combinaciones de Rasengan y Chidori.

—¡Hinata, cúbreme! —gritó Sakura mientras se preparaba para un ataque decisivo.

Hinata asintió y se colocó frente a Sakura, usando su Juuken para desviar los ataques que venían hacia ellas. Sakura, con una determinación feroz, concentró todo su chakra en un solo punto y lanzó un golpe devastador al Susanoo de Madara.

El impacto fue tremendo, y el Susanoo de Madara se desmoronó parcialmente. Aprovechando la apertura, Kakashi utilizó su Kamui para transportar parte del cuerpo de Madara a otra dimensión, debilitándolo aún más.

—¡Ahora, todos juntos! —gritó Naruto.

Los ninjas de la Alianza se unieron en un asalto final. Sasuke, con su Susanoo aún activo, lanzó una serie de flechas de Amaterasu. Naruto desató un Rasenshuriken mientras Hinata atacaba con su Juuken y Sakura con su fuerza inmensa.

Madara, aunque poderoso, no pudo resistir el asalto coordinado de tantos guerreros talentosos. Con un último grito de desafío, fue finalmente derrotado, su cuerpo resucitado por el Edo Tensei comenzó a desintegrarse.

—Esto... no ha terminado... —murmuró Madara mientras su cuerpo se desvanecía.

Kakashi, observando la escena, exhaló un suspiro de alivio. —Lo hemos logrado. Pero aún queda mucho por hacer.

Naruto y Sasuke se miraron, sabiendo que su lucha no había terminado. Todavía quedaban desafíos por enfrentar, pero esta victoria les dio la esperanza y la determinación para seguir adelante.

Hinata y Sakura se unieron a ellos, su camaradería fortalecida por la batalla que habían librado juntos.

—Juntos, podemos enfrentar cualquier cosa —dijo Sakura, su voz llena de confianza.

—Sí, no importa lo que venga, lo enfrentaremos juntos —respondió Hinata, su mirada fija en el futuro.

Con Madara derrotado y la Alianza Shinobi recuperando su fuerza, la Cuarta Guerra Ninja se acercaba a su fin. Los héroes de Konoha, habiendo demostrado su valía y su poder, estaban listos para construir un futuro de paz y esperanza.

Un destino diferenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora