Un destino diferente

Capítulo 26

Capítulo 26: Una propuesta especial y única.

Habían pasado tres años desde la boda de Naruto e Ino. La paz había florecido en el mundo ninja gracias a los esfuerzos constantes de la Alianza Shinobi. Sasuke Uchiha y Hinata Hyuga, quienes habían seguido cumpliendo misiones juntos, se habían convertido en una pareja formidable tanto en el campo de batalla como fuera de él.

Era una tarde tranquila en Konoha, el sol comenzaba a ponerse, tiñendo el cielo de colores anaranjados y dorados. Sasuke y Hinata caminaban por el bosque cercano a la aldea, disfrutando de la serenidad que solo la naturaleza podía ofrecer.

—¿Recuerdas cuando solíamos caminar por aquí después de nuestras misiones? —preguntó Hinata, con una sonrisa suave.

Sasuke asintió. —Sí, era nuestro pequeño refugio.

Se detuvieron junto a un arroyo, el sonido del agua corriendo creaba una melodía tranquila. Sasuke miró a Hinata, sus ojos oscuros reflejando una mezcla de determinación y afecto.

—Hinata —comenzó Sasuke, su voz tan firme como siempre, pero con un toque de vulnerabilidad que rara vez mostraba—. Hay algo que quiero decirte.

Hinata lo miró, con curiosidad y un toque de preocupación en sus ojos perlados. —¿Qué sucede, Sasuke?

Sasuke tomó una respiración profunda, reuniendo sus pensamientos. —Durante estos años, hemos pasado por muchas cosas juntos. Hemos enfrentado peligros, hemos luchado por la paz y hemos visto cómo el mundo cambia. Pero hay algo constante en todo esto: tú.

Hinata sintió que su corazón se aceleraba, pero se mantuvo en silencio, dejando que Sasuke continuara.

—Eres mi compañera en la batalla y mi refugio en tiempos de paz —dijo Sasuke, acercándose a ella. —He aprendido a valorarte y a entender lo importante que eres para mí."

Sasuke metió la mano en su bolsillo y sacó una pequeña caja de madera. La abrió, revelando un anillo sencillo pero elegante, hecho de plata con un pequeño zafiro azul en el centro.

—Hinata Hyuga —dijo, mirándola a los ojos con una intensidad que solo él podía tener—. A mi modo, quiero pedirte algo. Quiero que seas mi compañera para siempre. ¿Te casarías conmigo?

Hinata sintió que sus ojos se llenaban de lágrimas de felicidad. A pesar de la forma directa y un tanto brusca de Sasuke, pudo sentir todo el amor y la sinceridad detrás de sus palabras. Asintió, sin poder contener una sonrisa radiante.

—Sasuke, sí, acepto —respondió, su voz quebrándose ligeramente por la emoción—. Me encantaría casarme contigo.

Sasuke colocó el anillo en su dedo con una precisión y delicadeza que contrastaba con su habitual dureza. Luego, la abrazó, algo que rara vez hacía en público, pero en ese momento, no le importaba. Sentía una paz y felicidad que solo Hinata podía darle.

—Gracias, Hinata —susurró Sasuke, sintiendo el peso de la decisión y la alegría que la acompañaba.

—Gracias a ti, Sasuke —respondió Hinata, abrazándolo con fuerza—. Por ser quien eres y por permitirme estar a tu lado.

El sol se puso completamente, dejando paso a un cielo estrellado. Bajo el manto de la noche, Sasuke y Hinata permanecieron juntos, disfrutando del momento que marcaba el comienzo de una nueva etapa en sus vidas. Una etapa llena de amor, compromiso y la promesa de un futuro compartido.