CELDA 115

Capitulo 10

Después que él guardia salió con Sasori él otro guardia se giro para ver a Deidara.

Guardia 1: si quieres verlo en persona como él dijo debes pedirle permiso a la persona que te mando para acá

Deidara: está bien

Guardia 1: váyanse, no puedo acompañarlos ahora, regresen los dos a la salida del sector

Kakuzu y Deidara entonces se fueron del lugar y caminaron fuera del sector, Deidara estaba muy emocionado por qué había vuelto a ver a Sasori, estaba muy feliz y también nostálgico, pues apesar de que hayan pasado 3 largos años que no lo había visto seguía luciendo igual que la última vez que lo había visto,

Kakuzu: *suspiro pesadamente y miro a Deidara después de detenerse* no es de a gratis que te traje acá

Deidara: *volteo a verlo y alzo una ceja* tu me vez que tengo cara de millonario o que? Yo no tengo dinero y no te daré nada, no tengo que darte

Kakuzu: es verdad no tienes nada, incluso en tu cuerpo, tu cuerpo no tiene nada que otro hombre no haya tocado antes *luego sonrío obviamente esto lo decía enserio, no lo decía en nada de broma*

Deidara: *se quedó mirando serio al moreno* cállate, de mi no vas hablar cosas

Kakuzu: *lo tomo del brazo y lo acercó a él* Que me vas hacer? Le vas a decir a Hidan? O a Óbito? O Sasori?

Deidara: *empezó a forcejear hasta lograr soltarse* no necesito de ellos para protegerme de ti avaro de mierda

Kakuzu: a no? Y por qué siempre corres detrás de ellos cuando estás en problemas eh? Aún eres un niño en comparación con ellos que son completamente hombres, tu no te puedes defender

Deidara no dijo nada más y se dio la vuelta para continuar su camino hasta que sintió que sujetaban su hombro fuertemente.

Kakuzu: te lo diré una vez más y seré claro Deidara..... Alejate de este lugar, no regreses, me enteré por Hidan que conociste aun hombre que se llama Kisame Hoshigake, me enteré por otros medios que Pain lo ingresará a la prisión, y algo me dice que es para atormentarte lo que queda de tiempo, Seungbae no le sirvió de nada así que por eso lo mandara acá, te aconsejo que no te alejes del Uchiha, acercate mas a él y gánate su confianza seducelo si es posible pero no dejes que ese Uchiha te deje de lado y te descuide, te aconsejo también que no busques a Sasori por qué él Uchiha lo puede mal interpretar y los Uchihas son muy celosos con sus cosas

Deidara: *había quedado estupefacto ante tales palabras, al poco rato formuló pocas palabras* co-como sabes eso?... Quien te dijo eso?

Kakuzu: no importa de donde haya sacado esa información Deidara, pero no te tomes nada de lo que te dije a la ligera *prendió un cigarrillo, los guardias no le decían nada por qué ya sabían de quién era secuaz*

Deidara: por qué me dijiste todo eso desde un principio?... Por qué dijiste lo de mi cuerpo eh?

Kakuzu: *dio un suspiro soltando gran cantidad de humo por la boca y nariz* por qué sabía que en tu mente tan rota estabas pensando que te estaba pidiendo sexo, y me daba gracia por qué pensé que me conocías bien y sabes que no estoy interesado en sexo, me interesa más el dinero, llenarme mis bolsillos, por eso te dije todo eso, tu expresión me causaba gracia y ternura

Deidara: *bajo la mirada* pensé que querías eso.... Pero yo no tengo dinero para darte, no tengo nada para agradecerte está información que me has dado sobre Kisame, y se que parte de lo que dijiste de mi cuerpo es cierto.... No hay ningún lugar que no esté sucio

Kakuzu: *puso uno de sus dedos en sus labios para callarlo* Deidara... No digas eso, es lamentable que te haya pasado todo eso pero no pienses que tú cuerpo no es lindo o que no tiene nada atractivo, esos hermosos ojos azules como el zafiro y tus labios tan suaves y delicados junto a esa boquita tan pequeña que tienes te hacen ver atractivo, sigue mi consejo no te despegues del Uchiha él logrará sacarte de esa organización, y estoy seguro que también te hará sentir el amor, te hará sentir la persona más linda y pura del mundo, ahora vete y no le digas a Hidan que me puse cursi contigo

Deidara: *se sonrojo un poco y luego solamente sonrío* no conocía ese lado tuyo Kakuzu jajajaja, pero gracias, y una vez más gracias por la información, tal vez un día de estos te pague tu favor, hasta luego

Simplemente se dio la vuelta y se fue, Kakuzu no lo iba admitir pero es que le habían pagado para que él rubio se alejara del Uchiha y estuviera solo para que Kisame pudiera violarlo cuántas veces pudiera y quisiera, si algo era característico del Avaro Kakuzu es que era capaz de traicionar si alguien le llegaba a su precio, pero está vez no traicionaría al rubio si él se alejaba del Uchiha lo haría voluntariamente.

Por otra parte se había hecho de noche, Deidara está en su cama taradeando una canción, una canción de cuna que usualmente se la cantaba a él mismo para poder dormir después de que estaba con hombres lógicamente también estos se deleitaron escuchando cantar al rubio, él Uchiha había entrado a la celda cuando escucho al rubio y volteo a verlo.

Óbito; como te fue hoy en tu aventura? *Hizo referencia a la busqueda de su amigo*

Deidara: jejeje si está aquí, pero creo.... Que es mejor que no lo vuelva a ver

Óbito: *se acercó a él para sentarse aún lado* me alegra que por lo menos te haya ayudado a verlo una vez... Pero no olvides que cuando necesites algo yo estaré para ti siempre

Deidara: *volteo su mirada a él y sonrío* Gracias Óbito

Noto entonces Óbito que la mirada de Deidara había cambiado, tenía ojos seductores y una sonrisa coqueta así que Óbito dedujo que esté había vuelto con sus ideas de pagarle por obligación así que se levantó y sin decirle nada se fue a sentar a su escritorio para revisar algunas cosas que Madara le había enviado, todo esto estaba con normalidad, pero él Uchiha tenía un fuerte dolor en el cuello, Deidara noto esa incomodidad así que se acercó a él por detrás y coloco suavemente sus manos en sus hombros.

Deidara: estás muy cansado Óbito? *Dijo de forma dulce y empezó a masajear sus hombros*

Óbito: *cerro los ojos al sentir su masaje tan relajante* estoy más que nada estresado.... Después que te fuiste tuve un día ocupado

Deidara: *continuo con sus masajes subiendo los a su cuello* puedo ayudarte a quitarte ese estrés si quieres Óbito...

Óbito no pudo evitar quejarse un poco cuando sintió el masaje en su cuello, se sentía tan bien pero aún así no era suficiente para quitarse su estrés, Deidara noto eso así que haría algo que él Uchiha no iba a poder rechazar, continuo masajeando su cuello de forma suave y luego se acercó para darle besos en todo su cuello al igual que sus manos bajaron para acariciar todo el pectoral del Uchiha, al mismo tiempo en que el rubio aumentaba su respiración para darle entender cuánto estaba excitado, aunque realmente no lo estuviera.