Arco 4.3

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Cuando el cielo se oscureció, los zombis del supermercado habían sido expulsados y las puertas enrollables ya estaban cerradas. Los supervivientes, exhaustos de correr todo el día, se acurrucaron en los rincones, todos agotados.

En el interior oscuro, Tang Tang sollozaba, sintiendo que su cuerpo apestaba. Después de dudar por un momento, su mirada recorrió a los tres hombres con los ojos cerrados y a los otros sobrevivientes que roncaban al otro lado. Se levantó y se dirigió en silencio al área de descanso del personal en el supermercado.

"..." Los tres hombres que originalmente habían cerrado los ojos los abrieron, observando la figura del conejito que se alejaba, sus intenciones ocultas se agitaron en silencio.

Después de anochecer, toda la ciudad quedó en un silencio inquietante, salvo por los gemidos de los zombis. No se oía ningún otro sonido.

Las luces del interior del supermercado no estaban encendidas. Tang Tang se abrió paso a tientas hasta la habitación y descubrió el área de descanso mientras buscaba suministros. El área de descanso no era de gran tamaño, solo tenía una cama y un baño pequeño. Los uniformes de trabajo estaban esparcidos sobre el armario, lo que demostraba que era un lugar de descanso temporal para el personal del supermercado.

Después del apocalipsis, la gente descubrió que las luces, los olores y los sonidos podían atraer a los zombis. Tang Tang examinó cuidadosamente la habitación, asegurándose de que no hubiera ventanas, antes de encender la luz.

El baño, aunque viejo, estaba limpio. Tang Tang abrió la ducha y comprobó la temperatura del agua; sus ojos se iluminaron al instante.

¡Hay agua caliente!

Por fin pudo darse un baño reconfortante después de huir entre montañas de cadáveres y mares de sangre. Bajo el cabezal de la ducha, Tang Tang no pudo esperar más. Se quitó la ropa y el agua caliente cayó en cascada sobre su piel clara, formando rápidamente una niebla que empañó la puerta de vidrio esmerilado semitransparente.

La pequeña ventana de ventilación del baño estaba bloqueada, por lo que Tang Tang tuvo que dejar un pequeño hueco en la puerta para evitar desmayarse por falta de oxígeno. El agua lavó la suciedad de su cuerpo y su piel clara, humeante por el vapor, apareció rosada y brillante como una fruta madura, emitiendo una fragancia dulce y criminalmente tentadora en todo momento.

En medio del agua que corría, las enredaderas verdes se deslizaban silenciosa y sinuosamente hacia el baño a través de la grieta abierta.

El vapor llenó el baño mientras el cabello negro de Tang Tang se humedecía, su pequeño rostro se sonrojaba y tarareaba una canción en voz baja. Las enredaderas se acercaron silenciosamente y de repente se enredaron alrededor de sus extremidades, suspendiendo su hermoso cuerpo en el aire. En un instante, el mundo de Tang Tang dio un giro y dejó escapar un grito de sorpresa. Pero al segundo siguiente, su boca estaba cubierta por las exuberantes enredaderas verdes.

-Mmm... Mmm...

Las enredaderas treparon por sus tobillos, sus dulces y pegajosas secreciones afrodisíacas brillaban en su piel clara. Como una vibrante flor de ciruelo, aparecieron marcas rojas en su esbelto cuerpo. Los delgados tallos se hincharon y expandieron gradualmente, llenando la boca de Tang Tang hasta el borde.

Tang Tang luchaba sin poder hacer nada, su esbelto cuerpo temblaba sin cesar. ¿Qué era esto? ¿Qué era esta cosa?

Las enredaderas de color verde esmeralda parecían tener conciencia mientras acariciaban el cuerpo de Tang Tang continuamente. El tallo en su boca le hacía doler las comisuras de la boca. Increíblemente, se movía de una manera promiscua y lenta, imitando el sexo oral. Respiraba rápidamente y de repente recordó a uno de los tres hombres. El superpoder de Shen Yun era un elemento de madera.

Transmigración rapida : robando a los gons para tener s*xo en grupoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora