Transmigración rapida : robando a los gons para tener s*xo en grupo

Arco 6.12

Después de regresar a la mesa del comedor, Qi Yan parecía normal, y se oía un ruido de platos y palillos sobre la mesa del comedor. Los tres cachorros de lobo estaban mucho más tranquilos de lo habitual. Ni siquiera tocaron sus costillas de cerdo agridulces favoritas. Sus expresiones permanecieron inalteradas, pero una calma inquietante pareció acumularse en la habitación, como la calma antes de una tormenta.

Después de la cena, Jiang Xi se ofreció a lavar los platos y los demás no se negaron. Tang Tang estaba afuera limpiando la mesa y preparando fruta para todos. Bao Chengping también conversó con Tang Tang como si fueran buenos amigos.

Los tres cachorros de lobo habían ayudado con el trabajo pesado durante todo el día, por lo que Tang Tang los envió a descansar después de la cena. Después de todo, él tenía que cuidar de sus propios cachorros.

A medida que salía la luna, todos, exhaustos por el día, empezaron a sentirse somnolientos. El equipo de producción había preparado dos habitaciones. La más

grande era para el equipo de KFW y la otra tenía dos camas individuales para Jiang Xi y Bao Chengping.

Jiang Xi asintió con una sonrisa, pero estaba furioso por dentro. Este arreglo arruinó por completo su plan de seducir a los jóvenes maestros por la noche.

Con la cámara cubierta por la ropa, Tang Tang se arrodilló sobre la cama, extendiendo la colcha. Se inclinó hacia adelante, sus gruesas nalgas tensas dentro de sus pantalones cortos, lo que hizo que uno no pueda evitar imaginar si una bofetada crearía ondas de carne en ellas.

Qi Yan cerró la puerta detrás de él y sus ojos negros recorrieron la habitación, asegurándose de que no hubiera dispositivos de grabación ocultos antes de preguntar.

"Gege, ¿te gusta Jiang Xi?"

Su voz era suave y casi inaudible, pero puso rígida la columna vertebral de Tang Tang. Después de un largo rato, murmuró: "No".

Al oír eso, Qin Yu sonrió. Se inclinó, agarró el tobillo del gerente y lo masajeó suavemente. "Entonces... ¿Por qué Gege lo miró?"

La piel alrededor del tobillo estaba abrasadora y Tang Tang bajó la cabeza, aparentemente reacio a levantarla.

Meng Chenyi, con ojos de cachorro, se subió y besó los labios del gerente, sus narices se tocaron. Preguntó dulcemente: "¿Le gustamos a Gege?"

Antes de que Tang Tang pudiera responder, Qi Yan, que se había estado desabrochando el cinturón lentamente, dijo casualmente: "No importa si no te agradamos..."

Su tono fue suprimido, como un demonio saliendo del infierno, "Después de todo... Gege será nuestro por el resto de tu vida".

"No puedes escapar."

Meng Chenyi contuvo su sonrisa, pellizcó la barbilla del gerente y lo besó. Sus labios y lenguas se entrelazaron, y una pastilla que de alguna manera había logrado pasar por debajo de la lengua de Tang Tang se deslizó hacia su estómago durante el apasionado beso.

El beso repentino hizo que Tang Tang gimiera. Tragó saliva instintivamente, pero accidentalmente se tragó la pastilla y se la metió en el estómago.

"Tchhhh..."

Qin Yu le arrancó la mitad de la manga. Justo cuando el gerente estaba a punto de forcejear, otra voz seductora habló.

"Gege, no te muevas..."

"La hoja está afilada, y si corta algo importante... eso no sería bueno".

La espalda de Tang Tang se puso rígida y Meng Chenyi le pellizcó la barbilla y lo besó apasionadamente. La fuerza era tan intensa que casi se tragó su lengua y la saliva goteó lentamente. Qin Yu le mordió el pezón, lo que le provocó una sensación de hormigueo. Su respiración se aceleró e incluso pudo sentir una cuchilla afilada brillando entre sus nalgas, haciendo pequeños sonidos mientras atravesaba sus pantalones.