જ⁀➴【 𝐓𝐄𝐄𝐍 𝐑𝐎𝐌𝐀𝐍𝐂𝐄 】─── ;
❝ They were just two kids
Trying to learn to love ❞
╰┈➤ ・┆La traducción del libro a inglés está en AO3.
╰┈➤ ・┆Prohibido cualquier tipo de copia o plagio.
╰┈➤ ・┆No se...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
𝓔l sol del verano ya empezaba a asomarse en el cielo y poco a poco el calor veraniego era presente también. La herida de Kei ya se había curado por completo, más sus sentimientos cada día se desbordaban más.
Los días se habían pasado lentos y aburridos, clases por la mañana y trabajo por la tarde. Porque luego del regaño de su jefe, empezó a cuidarse un poco más, por lo que ya no podía ir a todas las salidas que Shinichiro le proponía junto con los de la Black Dragon.
Y eso era una lastima.
Ya todos eran sus amigos y ella ya casi que era considerada parte de la pandilla también. A veces asistía a las reuniones, aunque únicamente porque Benkei o Shinichiro le suplicaban.
Era fin de semana por lo que Kei podía dormirse aún más tarde y luego despertar hasta medio día. Porque como siempre, se había quedado trasnochando con alguno de sus videojuegos.
El sol ya empezaba a irritar y los rayos del sol acariciaban cálidamente el rostro relajado de Kei. Ya era medio día pero la azabache aún dormía y no planeaba en despertarse pronto. Estaba demasiado cómoda dentro de su cama con el ventilador golpeando en su cara.
La chica estaba acurrucada entre sus cobijas cuando su teléfono empezó a vibrar y el sonido de una llamada entrante sonaba. Kei intentó tomar el teléfono, aún dormida, pero solo se enredó más entre sus propias cobijas y terminó cayendo sobre el suelo de la habitación y segundos después el teléfono también cayó sobre su rostro.
Kei se quitó el teléfono de la cara de mala gana y respondió la llamada. El calor también añadía más puntos a su mal humor, pues cuando se cayó al suelo, su pie desconectó el ventilador y la habitación ya se sentía igual de caliente que un horno. El sol que brillaba tan fuerte al medio día solo molestaba, interrumpiendo la paz de su cuarto.
"Kei, buenos días, ¿Cómo amaneció la bella durmiente?" Bromeó Shinichiro al otro lado de la línea.
—Mal.
"¿Por qué tan amargada?" Shinichiro se rió un poco y luego volvió a hablar. "Takeomi va a hacer un fiesta en su casa, ¿quieres ir?"
El humor de Kei se esfumó en cuestión de segundos y una sonrisa se dibujó en su rostro. —¿Me recoges?
