Abro mis ojos de golpe cuando recuerdo que debo prepararme para una entrevista con un canal de televisión a las nueve AM, que es dentro de poco.
Salgo de mi habitación y como siempre que tenemos algo pendiente, se encuentra mi equipo en la sala de mi departamento esperando por mí.
—¿Cuánto llevas durmiendo, Isaías? —Se acerca mi maquillista Brenda, una hermosa mujer que nunca se me ha ocurrido tocar por una obvia razón: no tengo relaciones sentimentales con nadie de mi equipo—. Te ves un poco cansado, tenemos algo que hacer con esas ojeras y esos ricitos de oro que cuelgan sobre tu frente.
Se refiere a mi cabello, del que todo el mundo habla y con el que a mi equipo le encanta jugar a los peinados extraordinarios. Ellos saben que no me gusta que me toquen mucho el cabello o que le pongan nombres, sin embargo, me veo obligado en dejarlos peinarme en ocasiones especiales, no más de ahí.
—Puede que los deje jugar un poco con mi cabello, no tengo ganas de hacer nada por mi cuenta.
—¿Por qué tan depresivo? Veo que te ha pegado la muerte de Mickey.
Respiro profundamente.
—Era un buen muchacho, pero no tiene nada que ver con Mickey.
—¿Puedo saber?
Sin expresión alguna en mis facciones, la observo directamente a sus ojos.
—No.
Suelo ser así de frío cuando tengo problemas o no quiero que me molesten.
Ella incómoda se levanta de golpe para demostrar su enfado. No debería tomárselo personal, ya no me puede importar menos como se sienta. Sí, ahora estamos dos molestos.
Observo al equipo en la sala y a nadie se le ocurre mirarme, saben que ando en mis días donde no tolero a las personas.
Más tarde, cuando me he dado un baño, e incluso me he puesto un traje como si de un gran evento se tratara, el equipo unta sobre mi piel cremas y otros productos que en mi vida había visto. Y eso que he visto muchas cosas en mi carrera como artista del momento.
Mi cabello cae en rulos como páginas de un libro abierto sobre mis orejas y algunos en las mejillas. Me levanto de la silla que ha sido puesta frente al espejo de mi habitación y me dirijo a todos.
—Felicidades, no serán despedidos hoy —todos se ven las caras y no pueden detener la risa que en segundos se escucha por toda la habitación.
Bajamos por el ascensor al estacionamiento y nos encontramos con guardias de seguridad de nuestro equipo esperando por nosotros, reunidos junto con los del edificio.
Saludo a todos con un asentamiento de cabeza y unos buenos días. Brenda en lo que subo al auto me pasa un café de:
—¿McDonald's?
Ella sonríe con inocencia y se encoge de hombros. Va bien maquillada como todos los días, me es imposible no admirar tal belleza cautivadora.
—Iba a traerte de Starbucks, pero por alguna razón estaba lleno de turistas latinos.
—¿Latinos? Bueno. No es importante mientras esté bien preparado.
El auto arranca junto a tres coches más que nos siguen. Conmigo solo va Brenda por si surge alguna emergencia, debido a que mi última asistente renunció y no he podido escoger a alguien nuevo.
Esa es otra de mis reglas: el personal lo escojo yo.
—Lo probé antes de comprarlo, no iba a soportar un berrinche de tu parte en este día que me he prometido no enojarme.
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HOSANNA
SpiritualIsaías Leigthon, es un cantante de origen español en Brooklyn que domina el primer puesto en los rankings, y el cual es reconocido como "La Voz de Oro". Sin embargo, el hombre más exitoso, la estrella del momento en América, exponente de una vida co...