Minho busca cualquier lugar para tener relaciones con su querido esposo Jisung sin importar si sus hijos están en el mismo sitio.
─Mi-Minho a-aquí no ─habló entrecortadas veces.
─Minho aquí si ─sonrió para restregarse más en Jisung.
Solo tenían que...
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─Mmmg Minho, los niños─apretó los hombros del mayor ─p—para.
─Sabes muy bien que no quieres que pare, tu cerebro puede decir que pare, pero tu cuerpo dice todo lo contrario─comenzó a dar los roces entre sus miembros, escuchando los gemidos del menor.
Eran tan satisfactorios escucharlos, que quería de una sola vez entrar en Jisung.
Comenzó a dar pequeños besos y mordidas en el cuello del menor, escuchando como los gemidos se hacían mas fuertes, bajo su pantalón y vio la pequeña cintura de su amado esposo, después con delicadeza quito la ropa interior y se dirigió hacia la oreja de él y le susurró:
─Quédate callado, te escucharan los niños─metió su mano dentro de la camisa de su esposo y lo atrajo mas de él, viendo como se tapaba la boca con sus manos, evitando que sus gemidos se escucharán fuertes.
Comenzó de nuevo a dar pequeñas mordidas en el pecho de Jisung, bajando cada vez más, hasta que llegó al miembro del menor y lo lamió.
─Minho no hagas eso, no podre aguantarme si haces eso ─agarro el cabello del mayor para alejarlo pero fue inútil ─Vamos, aléjate.
─No quieres que haga esto ─lamió toda la extensión del miembro, escuchando leves gemidos roncos de parte del menor.
Se separó del miembro y se agachó para mirar la pequeña entrada del menor, quien podría decir que en esa pequeña entrada cabía un gran miembro. Lamió suavemente la entrada rojiza y enterró su lengua en esta.
─Mmmg ─gimió ─Min—Minho, más ─enterró mas sus dedos en la espalda del mayor.
─Necesito prepararte, pero no gimas muy fuerte.
Lamió y lamió la entrada, mirando como está se encontraba mojada, se levantó y se acercó a las clavículas de Jisung para darle leves mordidas.
Bajo su pantalón, junto con su ropa interior y dirigió su miembro hacia la entrada de Jisung, dando pequeños roces.
─Papás, Kazuha no me quiere dar mi juguete ─chillo aquella voz detrás de la puerta ─Papás, ¿por qué no abren?
Jisung y Minho se miraron asustados, nunca creyeron que su hijo viniera donde ellos, bueno, Jisung le había advertido al mayor que los niños vendrían pero él no lo escuchó.
─Te dije idiota que pararas ─lo regaño, susurrando a lo bajo ─Ponte la ropa.
Jisung se acomodó la ropa rápido y levantó y fue hacia la puerta, dio un suspiro y vio como estaba arreglado v abrió la puerta.
─¿Por que tardaron tanto? ─dio un pequeño sollozo ─Kazuha me quitó mi juguete.
─JeongIn, tu y Kazuha son hermanos y se tienen que compartir todo, así que déjala jugar un rato con tu juguete ─se agachó para quedar al mismo tamaño que su hijo ─Además, si dejas que Kazuha juegue un rato con juguete, te compraré el helado que quieras.
─Papá ¿me estas sobornando?─habló confundido, podía ser pequeño, pero sabía cuando alguien lo estaba sobornando.
─No hijo, ven aqui ─extendió sus brazos, para indicarle que quería un abrazo y él acepto solo es un premio, no soborno.
─Hagamos como que le creemos─pensó JeongIn.
Pero había algo raro, abrazo más fuerte a su papá y sintió como estaba caliente.
─¡Papá!─exclamó asustado─tienes fiebre, estas caliente y tienes morados en tu cuello ─comenzó a sollozar, Jisung no sabía que hacer o decir ─¡Le diré a papá Minho que estas enfermo!
Entonces, él se fue a buscar a su otro papá y decirle lo que pasaba.
─¿Esta hirviendo? ─preguntó Minho limpiando una lágrima de su hijo ─No te preocupes, ve con Kazuha yo hablo con tu papá ─él asintió y se fue.
Minho suspiró y se fue a ver a Jisung, se dirigió a la habitación, viendo como él estaba con la miradaavergonzada.
─Innie casi me atrapa, no le dije nada, pero..─paró de hablar y puso sus manos en sus cachetes ─Te imaginas cuando se entere de grande lo que hacíamos antes! ¡Que vergüenza!
─No te preocupes, apuesto que él no recordará esto y si lo hace, solo dirá que tenias fiebre, pero yo se que en realidad estabas caliente por otra cosa.
─¡Cállate Minho!
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