Minho busca cualquier lugar para tener relaciones con su querido esposo Jisung sin importar si sus hijos están en el mismo sitio.
─Mi-Minho a-aquí no ─habló entrecortadas veces.
─Minho aquí si ─sonrió para restregarse más en Jisung.
Solo tenían que...
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─Mierda ─hablaron al mismo tiempo.
Por otro lado, unas personas esperaban afuera de su casa, quiénes estaban con compras en sus manos.
─Está haciendo frio ─se quejo el mayor de los cuatro chicos─¿Por qué tardan tanto?
─Tranquilo Chan Hyung, tal vez no encuentran las llaves de la casas, ya sabes ─habló Jungwon, bajo sus compras y se froto las manos ─Pero aquí hace frío, llama a Zuha para que nos venga a abrir la puerta.
Chan suspiro frustrado y toco la puerta suavemente, puso su oreja pegada a la puerta e intento escuchar, pero solo había silencio, iba a despegarse de la puerta pero escuchó un ruido "No JeongIn , no hagas ruido, papás están arriba, no los molestes" ¿Cómo que estaban arriba. Chan se alarmó y comenzó a imaginar lo peor.
─Zuha ─habló con cariño─ Cariño, ¿puedes abrir la puerta?
Escuchó como los pasitos de la pequeña se acercaban a la puerta ─Tio ChanChan ¿Estás solo?
─No cariño, vine con tus tios pero esta haciendo frio y tus papás no han abierto, ¿no puedes abrir cariño? ─Chan amaba a sus sobrinos, pero no amaba cuando Jisung y Minho los dejaba solos─ ¿Puedes cariño?
Kazuha pensó y buscó las llaves, se dirigió a la mesa y la agarró. Se fue a la cocina y agarró una silla y la arrastro con ella hasta llegar a la puerta. Comenzó a subirse y meter la llave dentro de la puerta hasta que escuchó un click y supuso que ya estaba abierta, quito la silla y la puso en otro lado.
─Ya pueden entrar ─aviso.
Chan suspiró y abrió la puerta, mirando a su sobrina sonriendo de oreja a oreja y vio a su otro sobrino comiendo sus juguetes. A Chan se le quitó la sonrisa y fue a buscar a esos bastardos en su habitación. Subió lo más rápido las escaleras y caminó echando humo hacia el cuarto de los menores, se detuvo al escuchar unos sonidos extraños.
¡Pues a él le valió, él iba a entrar!
Pateo la puerta y entro, viendo como los dos enanos se vestían─ ¡Bastardos, como demonios hacen esto cuando están sus hijos! ─agarró una almohada y comenzó a darles con ella─ Pinches hormonales, ¡para eso yo los cuido!
─Lo siento Chan Hyung! ─hablaron a la vez.
Chan dejó la almohada en el suelo y se acercó a ellos y les jaló la oreja─ ¡Nada de lo siento, o sea no les da vergüenza! ¡Me estaba congelando afuera y ustedes aquí bien calenturientos! ¡No lo vuelvan a hacer o les irá peor!
Minho dirigió su mirada a Jisung y vio como se estaba riendo. ¡Como se estaba riendo en esta situación dolorosa! Chan se percató de eso y jaló más fuerte la oreja de Jisung.
─¿De qué te ríes?─preguntó confundido.
─Es que me duele tanto que me da risa ─rio más cuando sintió que su oreja era jalada.
─¡Apa Sung y MinMin están jugando! ─se acercó hacia ellos y le agarro la pierna a su papá─ ¿Por qué papá Sung solo tiene puesta una camisa? ─fijó su mirada hacia sus padres.
Chan entró en pánico y se agachó para quedar a la altura de la pequeña──Cariño, a tu papá Sung se le rompieron los pantalones, por eso no los tiene puestos─ besó la cabeza de la niña y acarició su cabello.
─¿Puedo Jugar? ─el mayor rio y negó─ Por favor tío ChanChan, tío Jungwoonie dijo que jugaremos más tarde─ habló con brillos en sus ojos.
─Si, pero tus papis estarán aquí conmigo hablando un ratito, ve con tus tíos un ratito, te traje pastel y si te portas bien, tu tío Chan te dará a ti y a tu hermanito un gran trozo de pastel.
A Kazuha le brillaron los ojos y asintió, se fue de la habitación dando saltos pequeños, dándole ternura a las personas presentes. Chan se levantó y se giró a ver a los menor, quienes estaban sonriendo.
─Chan Hyung, sabes que te amamos mucho ─Jisung quiso abrazarlo pero este le agarro la oreja.
─¡Tú y Minho me darán una gran explicación, pinches hormonales! ¡Me dará algo un día por ustedes!─frunció Su ceño.
─¡Suéltame la oreja, quedaré como Dumbo si me la sigues jalando!
Minho se cruzo de brazos y bufó─ Bien que le gusta jalarmela ─susurró pero el mayor lo escucho.
─¡Como dijiste mocoso insolente! ─se acercó a él y le jaló el pelo.
─Te amo Chan Hyung!
─No quiero Te amos, ¡quiero una explicación!
─¡Si Hyung!─hablaron a la vez.
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