Edgar
Después de un largo tiempo de recorrido, llegamos a una "casa".
Eso definitivamente era una mansión, pero bueno.—Uh, Fang. —Llame su nombre tratando de que me prestará atención. Llevaba un buen tiempo hablando por teléfono con Maisie, creo que así se llamaba.
—El deber me llama, después te sigo explicando. Nos vemos, Maisie. —Fang soltó su teléfono y lo guardo en su bolsillo. —¿Uhm? ¿Qué sucede?
—Parece que ya llegamos a tu "casa".... —Agarró mi mano con suavidad y me ayudo a bajar del auto.
Fang solo se dedicó a asentir lo mencionado anterior mente y llevarme hacia la entrada de su casa.
Mi cuerpo se sentía un tanto delicado, después de todo no tuve mi muy debido descanso apropiadamente.
Ahora mismo todo se sentía como un gran vacío tapado con flores para que no se viera la oscuridad qué traía consigo.
Las flores eran Fang y mi aborto era la oscuridad.
Fang tocó la puerta, siendo abierta por dos sirvientas dejándonos pasar.
—Tus sirvientas... Creo que recuerdo a una qué vi de reojo ese día. —Fang carcajeo ante lo dicho y me abrazo.
—Si te incomodan las puedo cambiar de casa, no tengo mucho problema. —Dijo esto en un susurro detrás de mi oreja.
—¿Cambiar de casa? —Lo mire extrañado, ¿Este tipo caga plata o qué?
—Tengo más de una casa, uhm, bueno. Solo una, lo demás son departamentos que arriendo y uno por ahí abandonado. —Dijo esto con total naturalidad, como si fuera lo más normal. Yo solo me le quedé mirando con la boca semi abierta.
—Yo solo tengo mi pocilga donde vivo con mi hermana... —Esto último lo dije en voz más baja, recordando que ahora mi hermana se quedaría sola si mi padre decidía irse de nuevo.
Fang notó esto y trato de arreglarlo. —Si quieres... Puedo decirle a tu hermana que se quede un tiempo con nosotros.
Mi mirada se iluminó al escuchar esto. Al menos mi hermana no se quedaría sola.
—Si... Por favor. —Bese la mejilla de Fang en signo de gracias, por su parte se sorprendió y me abrazo un poco más fuerte.
Antes de que pudiera decir algo, Fang me tomó en brazos al estilo princesa y empezó a caminar.
—¡Hey! —Me quejé mientras pataleaba con un poco de fuerza. —¡Cuidado que te puedes caer! —Fang dijo esto mientras trataba de no tambalearse por mis pataletas.
Un punto donde Fang estaba tratando de subir a la habitación, sentí un dolor horrible en mi vientre, como un ardor.
Detuve en seco mis pataletas y Fang aprovecho para ir más rápido a la habitación y dejarme en la cama.
Fang estaba zumbido en sus pensamientos, por lo cual no notó mi malestar hasta que se fijo en mi leve mueca de dolor.
Me recostó de una manera más cómoda en la amplia cama y me tapó con las sábanas qué ya conocía.
—¿Qué te duele?, ¿Hice algo mal? —La expresión de Fang era de total preocupación.
—Me duele.... El vientre... Uhm. —Fang acercó su mano hacia mi vientre y lo acarició con cariño y ternura.
—Lo siento, esto es mi culpa... Yo no tuve que d-dejarte... S-si yo no hubiera... —La voz de Fang se corrompia mediante hablaba, estaba llorando.
En el fondo sabía que era culpa de los dos, pero por alguna razón sentía que si no fuera por mi, pudimos haber tenido nuestro bebé y estar juntos...
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𝙳𝚘𝚗'𝚝 𝚠𝚘𝚛𝚛𝚢 𝙰𝚋𝚘𝚞𝚝 𝚃𝚑𝚊𝚝 ᵉᵈᵍᵃʳ ˣ ᶠᵃⁿᵍ⚥︎
Romance-Yo... Yo nunca quise esto. °Omegaverse°