Dulce mal - MoonSun ADAPTACIÓN

Capítulo 12

La colonia de Moonbyul

Mantuvimos nuestros pensamientos para nosotras mismas mientras entrabamos a Nuevo México. El cambio abrupto en el paisaje llenó mi mente con alivio. Las llanuras de Texas se habían convertido en extensiones de suaves colinas y montañas pequeñas, irregulares, con arbustos. El sudoeste asomándose. Me sorprendió lo mucho que podía ver.

Moonbyul desaceleró cuando el sol caía bajo en el cielo. Aparcamos en un lugar de comida rápida y salí a estirar las piernas. La ausencia de humedad hacía que el aire delgado se sintiera en mis pulmones. Yo estaba acostumbrada a atragantarme con la humedad.

Pedimos comida y nos la comimos en silencio, sentadas frente a la pared de cristal que daba a la playa de estacionamiento. La puesta de sol provocó una túnica de color rosa oscuro y naranja extendiéndose por el paisaje.

-Bonito país el que vemos. Muy diverso.

-Es magnífico -estuve de acuerdo, empujando la otra mitad de mi sándwich de pollo hacia ella. Lo terminó mientras mordisqueaba la última de las patatas fritas.

-Vamos a seguir un par de horas más y luego pasaremos la noche - dijo-. Voy a esperar para llenar el tanque hasta la mañana.

Asentí con la cabeza y limpiado toda la basura para estar lista para irnos. El pensamiento de otras noches juntas me ponía nerviosa.

A medida que subimos en el coche y continuaba por la I-40, la belleza del viejo oeste me animó. La mirada de Moonbyul rozó sobre mí cuando me volví hacia ella, tirando de mis pies desnudos debajo de mí.

-Hay alguien más que necesito ver en Los Ángeles, además de mi padre.

Ella asintió con la cabeza para que yo continuara. Le conté la historia del ángel que visito a Wendy, y cómo llegó a ser mi madre adoptiva. Entonces le dije que la monja, la Hermana Ruth, había pedido que viniera a hablar con ella en persona.

-Simplemente no puedo imaginar lo que tiene que decirme que no podía decirle a Wendy.

-Huh. No he oído nada acerca de los ángeles bajando y hablar directamente a los seres humanos en la historia reciente tampoco.

-Estoy preocupada de que no va a vivir mucho más tiempo -le dije-. Creo que esa es la única razón por la que Wendy me dejó venir contigo a este viaje.

-Vamos a llegar a tiempo.

Eso esperaba.

-Quiero saber todo lo que sabes acerca de los demonios -le dije.

Se aclaró la garganta y comenzó: la materia de manera casual.

-Estoy segura de que has oído hablar de los siete pecados capitales: ira, la pereza, la gula, la envidia, la codicia, la lujuria y la soberbia. La soberbia se dice que es el pecado del cual surgen todos los demás. Así que aquí está cómo funciona su clasificación en la tierra: hay un demonio en forma humana asignado a cada uno de los siete pecados capitales, salvo la pereza y la gula, aquellos se han combinado en un demonio, ya que a menudo van de la mano. Hay seis pecados adicionales también: la mentira, el asesinato, el maltrato u odio, el robo, el adulterio, y la sustancia. Eso hace doce ángeles oscuros en cuerpos humanos. Se les conoce como los Duques, y ellos son los jefes del mal en la tierra.

-¿Nuestros padres son dos de los doce Duques?

-Eso es correcto.

Era extraño escuchar hablar a Moonbyul. Su acento adquiría un tono pícaro cuando estaba excitada o enojada, pero luego había momentos, como ahora, que sonaba como una alumna refinada dando un informe oral. Me di cuenta de que podía transformarse para adaptarse a su público. Moonbyul podría desempeñar el papel de una chica mala arenosa o una señorita educada según fuera necesario. Pero, ¿quién era en realidad? Llegué de nuevo a frotar mi cuello, que había empezado a picarme.