capitulo 13

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sentí algo pesado sobre cuerpo,  la vista se empezó a nublar, caí al suelo... me desmalle.

todo esto se estaba volviendo muy extraño, sobrepasaba a lo que ya había vivido antes, es decir, si sentía odio y aveces escuchaba voces pero no asta este punto. nunca había creído en las cosas paranormales, pero esto es diferente, no son cosas que se pueden descifrar o comprender simplemente no tiene sentido y es que si hubiera alguna razón para que esto me este pasando lo entendería, no encuentro ninguna jodida explicación. no estoy segura ya no me siento segura, mis sentidos están a todo lo que dan, tengo los pelos de punta cada vez que entro a una habitación , como sea, tengo que enfrentarme a lo que me esta causando tanta molestia si no lo hago me seguirá molestando, pero ¿como?, nunca me había pasado y "eso" no se lo que es, nunca había buscado respuestas a mis miles preguntas pero ahora es el tiempo de que alguien de una vez me conteste, no dejare que nada se me escape...y aun que... no estoy lista tengo que hacerlo, tengo miedo tengo miedo.

desperté en el cuarto de mis padres sobre la cama, a lado de mi estaba tere y enfrente sentado en una silla mi padre con su agenda en la mano.

-¿estas bien? ¿te sientes mejor?... te llevamos al medico, dijo que no teníamos de que preocuparnos, solamente que no comas muchas grasas ya que se te bajo la presión ¿necesitas algo?- tere ella tan buena como siempre, me sorprendió que ella me auxiliara en vez de mi padre que me miraba sin ninguna emoción.

-estoy bien gracias tere... hola papa-

-ana-dijo con un tono de voz grave- que bueno que estas bien-seguía sin mostrar ninguna emoción.

tere se disculpo ya que tenia que salir a arreglar todo para la fiesta, mi padre seguía ahí.

de pronto algo me empezó a intrigar.

-puedo preguntarte algo-

-lo que quieras princesa-

-¿como murió mama?- pregunte sin dejar de apartar mi vista sobre el

el echo un risa y dijo-tere aun no muere cariño-

-no me refiero a tere-

su semblante cambio a serio-tu sabes por que ya hace tiempo que te lo dije-

-¿por que no tenemos ninguna foto de ella, tu ni siquiera te has dado el tiempo de describírmela-

-bueno sus fotos desaparecieron antes de que nacieras, y ella tenia el cabello oscuro-hizo una pausa para tragar saliva, pude notar que sus rodillas temblaban-pero no te preocupes por eso ahora tienes a tere-

-a mi madre... bueno- estaba lista, ahora le diría algo sobre mi y no estaba segura si respondería estaba seguro que el sabia algo-¿no le pasaban cosas extrañas?

-¿a que te refieres ana? no entiendo-

-ya sabes... si no le pasaban cosas extrañas, no se ¿nunca la viste o nunca te comento algo que pareciera una locura?, así como,¿ paranormales, voces o personas extrañas?-

--cállate ana- la misma voz que me había gritado momentos antes, pero mi padre no parecio haberla escuchado, estaba dentro de mi.

-por favor-rogué ya que la voz me seguía atormentando-te lo suplico dime algo-

-no cállate es un secreto nadie debe de saber, el no resolverá ni te explicara nada solo pierdes el tiempo, es un tonto ya viste su cara de mediocridad, no digas nada- decía una y otra vez la vos retumbando en mi cabeza de un lado a otro.

-lo siento ana pero no puedo... mas bien no lo se-dijo con voz firme.

-por favor- llore, la voz seguía gritándome una y otra ves y dolía enserio dolía, me tape los oídos pensando que eso cesaría los gritos-¡por favor! ¡se que sabes algo!-

-no ana no lo se- se empezó a quebrar, se levanto de la silla, y justo cuando iba a salir de la habitación grite.

-¡que no entiendes! ¡me pasan cosas extrañas, escucho voces y no me dejan en paz,  no puedo dormir no puedo hacer nada! ¡papa! ¡papi! ayúdame, que no es suficiente con lo que te digo, ¡maldita sea! ¡tu hija sufre! ayuda ayúdame-lo mire directo a sus ojos, se que sentía mi dolor, lo se, una mirada lo dice todo, sus ojos se empaparon de lagrimas, se que trataba seguir duro como siempre

-lo siento-dijo casi sin voz-no puedo hacer nada por ti- salio de la habitación y cuando creí que se había marchado me di cuenta que el seguía tras de la puerta, lo escuchaba, escuchaba sus sollozos-ana te amo, eres mi hija mi hijita, pero... no puedo hacer nada para ayudarte y nadie lo ara-dijo aun sollozando-de verdad, recorrería todo el mundo para ayudarte, aria lo imposible, pero es imposible por que nunca permitiría que me aparten de ti, entiéndeme por favor, perdí a tu madre y no te perderé a ti-

-¿pero que?¿por que dices eso?... nunca nos separarían, mi madre murió nadie la separo de ti-

-tu madre no esta muerta-y tras esas palabras escuche un quejido, no mio si no de mi padre que se encontraba destrozado.

el tiempo se detuvo, no encontraba palabras, no escuche mi corazón latiendo, todo se desvaneció, me pareció haber caído a un vació y de pronto una explosión surgió dentro de mi permitiéndome caer en llanto.

-¡me mentiste!-dije dolida

-no ana, por favor no creas que soy un monstruo sin corazón , lo hice por tu bien, por nuestro bien-

-!protegerme ¿de que?, no has hecho nada por mi,-tome un segundo para respirar-desapareciste cuando mas te necesitaba, y trajiste a una persona extraña para que suplantara a mi madre-

-¡joder ana! entiende-grito llorando

-no tu entiende, me separaste de mi madre ¡¿donde esta?! ¿donde esta mi madre? responde quiero saber ¿donde esta mi madre?- el seguía llorando tras la puerta y yo hice caso omiso a la voz en mi cabeza.











AnaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora