Volando A Tu Lado || Rio2 FANFIC

12.- Aclaraciones del Corazón

La noche se notaba cada vez más viva, tanto los humanos como las aves celebraban la festividad con gran emoción. Se podía oler cómo la madera era quemada en la orilla del mar por los humanos, cocinaban carne y bebían. Era una celebración total que parecía atraer a turistas también.

Nuestros protagonistas, por otro lado, estaban sentados comiendo un poco de ensalada y otras cosas sin importancia.

Blu parecía muy centrado en la celebración y en cómo los humanos parecían reír y bailar de un lado a otro.

—Es increíble cómo lo hacen con tanta facilidad, a veces me sorprende lo hábiles que pueden llegar a ser —dijo Blu, mirando a los humanos.

—Cierto, creo que el poder tener brazos en vez de alas es bastante ayuda —Coco parecía perdida en su mirada.

Blu ignoró este detalle, pero logró verla de reojo y pensó: "Supongo que sigue con lo que pasó hace rato, puede que haya sido algo cruel...".

Así que, volviendo a lo que pasó hace unas horas.

-Ups...

Blu estaba ciertamente sorprendido por lo que escuchó, pero trataría de fingir que no vio ni escuchó nada, por lo que dejó la bolsita a un lado.

—No sabrán lo fácil que es conseguirlo, ¿me perdí de algo? —dijo Blu, manejando bien su cara de sorpresa y de cierta pena.

Mia, tratando de librarse, agregó —Ves? Ni cuenta se dio, no tienes de qué preocuparte.

Coco, aún apenada, sabía lo que trataban de hacer ella y Mia. —Ahora que estás aquí de verdad... quiero hablar contigo.

Blu afirmó con la cabeza, mirando a Mia unos segundos. Esta solo alzó los hombros deslizándose de la responsabilidad.

Finalmente, Coco y Blu fueron a un lugar más alejado de Mia y de algunas aves que estaban cerca de la zona para hablar. Ambos no se miraban a la cara, miraban el entorno, algunas plantas y detalles para evitar romper el hielo, pero Coco no podía hacerle esperar.

—Oye, debo hablar contigo sobre algo muy importante, ¿puedo? —miró seria a Blu, haciéndole saber que iba en serio.

Blu correspondió y giró para detenerse y escucharla —Soy todo oídos.

Coco, al principio, no supo qué quiso decir con esta frase, pero supuso que estaba dispuesto a oírla.

—Mira, no tienes que hacerte el sordo conmigo. Sé lo que escuchaste y quiero decirte que... es cierto...

Blu, aún serio y sin perder la compostura, siguió educado sin responder a nada.

—Desde que vi cómo te trataron, cómo respondiste, trataste de dejarlo todo por ellos, pensabas abandonar toda tu vida por tu familia. Eso fue algo que me llamó la atención —Coco, en ocasiones, miraba a otros lados y se expresaba corporalmente, sin duda, signos de nerviosismo.

Blu no decía nada, solo prestaba atención atentamente a cada palabra y en ocasiones se notaban pequeñas sonrisas.

—Cómo tratas a todos, cómo eres conmigo, cómo me prestaste tu hogar y tu tiempo, tu vida con tal de cumplir tu promesa. Son cosas que siempre admiré.

Por otra parte, el azulado, cautivado, a punto de contestar: —Yo...

—No quiero que contestes nada, solo me gustaría decirte que me gustaste por todos esos atributos, pero no es eso. No me gustas, simplemente me enamoré de ti, de todo. Porque si me gustaras, sabría que es porque eres gentil o por ser lindo o demasiado atractivo, pero cuando de verdad es amor, es enamorarse sin saber la razón, el mero hecho de pasar rato con esa ave y sentir cariño por algo tan simple como eso. Eso es verdadero amor, eso es lo que siento. Tenía que decirlo, no quería vivir y un día arrepentirme de no haberlo dicho.