➥Epílogo

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—Mmm... cariño, ¿Estás segura de esto?—. Preguntó la pelinegra soltando un jadeo ante la manera que era besada.

—Alfa... Estoy lista.

Ambas se miraron cómplices y con una sonrisa Becky tomó a Freen de la cintura escuchando un jadeo de su parte al ser llevada a la cama. Aquel vestido blanco que Freen estaba usando desapareció en tan solo segundos al igual que la ropa de la otra novia.

Los besos de Becky bajaron al cuello de Freen comenzando a dejar algunas marcas. Becky bajó a los pechos de su esposa comenzando a chupar uno mientras el otro lo estimulaba con su mano escuchando gemidos y jadeos de su esposa.

—Ah.. Bec.. no te detengas.

La otra mano de Becky bajó al clítoris de la pelinegra comenzando a masturbarla otorgándole placer mientras se deleitaba con los gemidos que Freen soltaba.

Detuvo todos su movimientos y se acercó a la mesa al lado de la cama, bajo la atenta mirada de Freen sacó un preservativo para luego volver y besarla nuevamente.

—Becky.. ¡Ah!..— Soltó un gemido al sentir los dedos de la pelinegra en su entrada.

—Demasiado lubricante—. Dijo en un gruñido y con tono grave sacándole una risa a Freen. —No necesitas preparación.

—Estoy lista Bec, te necesito.

Bajo este pedido Becky abrió el preservativo y se lo puso para luego ubicarse entre las piernas de Freen, un mínimo roce bastó para que Freen gimiera alto suplicando para que entrara.

—¿Avísame si te duele sí?—. Le dijo al oído tomándola de la cintura mientras Freen afirmaba con su cabeza.

Entró en Freen soltando un gruñido de satisfacción al sentir como era apretado su miembro, por otro lado, Freen comenzó a gemir al sentir aquel intruso en su interior, mentiría si dijera que no dolía.

—G-grande ¡Ah!—. Soltó un gemido mientras sus ojos comenzaban a derramar lágrimas.

Becky se detuvo un rato dándole besos en el cuello y rostro tratando de calmarla. Cuando sintió el movimiento de caderas de Freen se movió comenzando embestidas suaves escuchando un gemido por cada una de ellas.

—Ah.. Becky más.

Aceleró sus movimientos reemplazando el dolor que Freen sentía por placer. Se movía de manera lenta mientras la besaba y escuchaba los gemidos de su esposa.

Comenzó a aumentar las embestidas mientras llevada uno de los pechos de Freen a su boca nuevamente y una mano bajaba para atender el clítoris de la pelinegra.

La sobre estimulación que recibía la hacía gemir fuerte pidiendo por más mientras Becky se deleitaba con su voz y su cuerpo.

—Eres perfecta Freen—. Habló sin dejar de moverse. —Prometo hacerte la omega más feliz y darte lo mejor.

—Ah.. B-Becky—.

—Tranquila hermosa ah—. Los movimientos que comenzó a hacer Freen con sus caderas lograron hacer gemir a la alfa.

Becky tomó las caderas de Freen aumentando los movimientos, al poco tiempo Becky se encontraba debajo de Freen recibiendo sus besos y sus movimientos de caderas mientras la alfa sólo se dedicaba a moldear el cuerpo de su esposa.

—Ah.. B-Becca, más.

Sus movimientos aumentaron logrando que Becky soltara gruñidos roncos.

—Mmm... Bec... ya no puedo más.

Freen dejó de moverse dejándose llevar por Becky. Volvieron a cambiar de posiciones comenzando nuevamente las embestidas.

Mientras el tiempo pasaba, los gemidos de Freen volvían a escucharse en la habitación, los movimientos acelerados comenzaran con un solo objetivo, llegar al final.

—A-alfa—. Llamó Freen en un gemido mientras mostraba su cuello. —Hazlo.

—Lo haré—. La piel de la pelinegra sintió el leve roce de los dientes la castaña.

Ambas llegaron al clímax sintiendo cómo el nudo se formaba y Becky la marcaba.

El pequeño grito de Freen alarmó a Becky, cuando retiró sus colmillos comenzó a besar aquella zona y lamer la sangre que salía mientras la pelinegra sonreía al poder sentir el nerviosismo de su alfa.

—Estoy bien Bec.

Con una sonrisa volvieron a besarse esperando a que el nudo bajara mientras se repartían mimos y besos sintiendo calma y felicidad a través de su marca.

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Gracias por acompañarnos en esta historia

Enamorada de mi abogada 「 Freenbecky 」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora