Cuando la Última Estrella Muera (En Proceso)

19) Secretos Ocultos

Adery:

Me siento en las gradas, observando la clase de natación, las chicas se alegraron cuando me vieron llegar pero cuando les dije que solo he venido a observar los entrenamientos porque tengo un poco de gripe se desilusionaron.

Charlie me pidió que por mi bienestar no lo hiciera por un tiempo.

No pensé que iba a extrañar tanto esta clase hasta ahora que estoy aquí y no puedo practicarla.

Entonces me pregunto ¿será esto lo que quiero para mi futuro? ¿Será algo más? La verdad es que no lo sé, y eso me agobia demasiado, tal vez es porque antes no pensaba tanto en el futuro, pero ahora... Me da un poco de ilusión hacerlo.

Bien dicen que soñar te da esperanzas, y tener esperanzas te ayuda a seguir adelante.

Ahora es cuando más necesito eso.

Me levanto y me despido de las chicas con la mano. Este lugar me trae muchos recuerdos bonitos, y en la mayoría está Elliott, su sonrisa y sus abrazos cálidos.

Al salir me encuentro con Eidan en el estacionamiento, tiene el cabello mojado y las mejillas sonrojadas por el entrenamiento.

— ¿Estuvo duro el entrenamiento, eh?— asiente.

— Sí, el entrenador no deja de exigirnos que nos esforcemos más.

Nos subimos en el auto y pone la calefacción enseguida, a estas fechas ya hace demasiado frío.

— Dejas tu alma en los entrenamientos.

Se encoge de hombros.

— Siempre se puede dar un poco más, ¿quieres ir por un chocolate caliente?

Asiento de inmediato.

— Sí, por favor, lo necesito.

Ponemos una canción de su playlist y cantamos de camino, cuando llegamos apaga el auto y entramos en el lugar.

Hace algún tiempo que no venimos y no recordaba lo acogedor que era este lugar.

— Si quieres ve a sentarte mientras yo pido las bebidas— me dice, dirigiéndose a la barra del lugar.

Busco una mesa cerca de la ventana y tomo asiento mientras lo espero. Al cabo de unos minutos regresa con dos tazas de chocolate caliente.

—Y bien ¿que tal lo llevas?— pregunta ya sentado frente a mi.

— ¿Él que? Mmm esto está delicioso— digo al probar el chocolate.

—Sabes a que me refiero, hablo de como lo llevas después de lo tuyo y Logan.— aclara como si fuera obvio.

— Muy bien— hace un gesto— Bien, la verdad es que muy mal. Aún me siento mal por todo lo que le dije ese día.

— Ya sabes lo que pienso de eso Addy.— le da otro sorbo a su chocolate— Pero respeto completamente tu decisión. Solo no me gusta verte así.

Su teléfono suena sobre la mesa y el nombre de Andrew aparece en la pantalla.

— ¿Hola? Eh... en la cafetería de siempre, ¿que? Con Addy... sí, esta bien.— cuelga y frunce el ceño.

—¿Que quería?

— Me dijo que quería hablar sobre algo importante, viene en camino, parecía un poco alterado, como si estuviera preocupado por algo.

Inmediatamente pienso en Logan ¿estará bien? Espero que si, ayer no lo parecía.

Pensar en él me recuerda que tengo programada una visita para Ada, la última vez que estuve en el hospital pasé a verla pero me fui al poco tiempo para no chocar con Logan.