EL DESTINO NOS JUNTO POR ALGO

Capítulo 19

—Camila, duermo solamente con mi novia, por eso es mi novia—. Dijo Pedri.

—Bueno eso no decías antes Pedrito—. Dijo Camila coqueteando con Pedri

—Chica que dejes a mi novio en paz—. La dije con demasiada paciencia diría yo.

—Ya, dejar de pelearos—. Dijo Pedri mirándonos a las dos.

*

No se que le pasaba a Pedri, estaba muy lejano a mi, estaba todo el rato con la Camila, me sentía sola, sentía que ella era la novia y no yo.

Pero de repente llego la familia de Pedri, yo ya había tenido la oportunidad de conocerlos, y me trataban muy bien, y me llevaba genial con ellos, yo los quería mucho.

*

—Cariños míos—. Escuche a la madre de Pedri decir mientras se acercaba a nosotros tres con el padre de Pedri, Fernando, y su hermano también llamado Fernando pero le llamábamos Fer.

—Rosi—. Dijo yo acercándome a la madre de Pedri para darla un abrazo.

—Que guapa estás cariño,¿Que tal todo?—. Me dijo Sonriendo después de haberme dado dos besos.

—Muy bien aquí con su hijo y la mejor amiga de él—.

*

Yo me acerqué a darle dos besos a el padre de Pedri y a hablar con Fer. Mientras Rosi se acercaba a saludar a su hijo.

—Fer—. Dijo yo refiriéndome al hermano de Pedri.

—Cuñada,¿Que tal?—. Me dijo el a mí dándole un abrazo.

—Bien ¿y tu?—.

—Bien, ¿Quien es la que Pedri la tiene el brazo por encima?—.

—Su mejor amiga—. Le dije yo muy seria y bajando la cabeza.

—Buf, no me da buenas vibras, ten cuidado—.

Me dijo Fer mientras miraba extrañado a su hermano y a la mejor amiga.

—¿Permites que estén así de juntos?—. Me dijo al rato.

—No puedo hacer nada, tu hermano no se despega de ella, parece ella la novia—. Le dije con tono muy triste.

—Bueno vamos cuñada—.

*

Y fuimos hacia donde estaban Pedri, Rosi, Fernando y Camila.

—Encantada señora Rosi, tiene un hijo que trata muy bien a la gente—. Escuche decir a Camila.

—Eso lo sabemos y por eso de tener una novia tan guapa y tan amable como Sofia—. Dijo Rosi sonriéndome.

—Muchísimas gracias Rosi, la aprecio demasiado—. La dije yo sonriéndola.

*

Paso un rato y estábamos viéndolos entrenar, habían venido casi todos los familiares de los jugadores al entrenamiento.

—Pedro—.

—Dime morena—.

—Ven quiero hablar contigo—.

—Voy—.

*

Nos apartamos de sus padres y su hermano y su mejor amiga para hablar. Nos metimos en los vestuarios.

—¿Que pasa?—. Me dijo el.

—¿Que te pasa con esa chica?—.

—¿Con Camila? Nada—.

—¿Y por que cojones parece ella tu novia en vez de yo?, lleváis todo el día juntos y tú con tu brazo por encima de su hombro.

—Sofia tranquilízate—.

—¿Que me tranquilice?, me ha dicho que soy un juguete para ti, que la quieres a ella, ¿De verdad quieres que me tranquilice?—.

—¿Que cojones?—.

—Dime la verdad, ¿Te gusta?—.

—No, me gustas tu Sofia—.

—¿Y por que la tratas como si te gustara?, así empezaste conmigo—.

Estaba apunto de llorar y él lo sabía, también sabía que cuando empezamos la relación tenía mucho miedo de que me hiciera daño, y él me lo estaba empezando a hacer, quisiera o no.

De un momento a otro me empezaron a caer lágrimas por los ojos.

—No llores sofi—.  Me dijo dándome un abrazo.

—Pedri no te quiero perder—. Le dije agarrándolo más fuerte.

—Y no lo vas a hacer, solo estoy para ti, solo te amo a ti—.

En ese instante me llego un mensaje de un número.

—Deja en paz a Pedri, si no lo dejáis va a haber grabes consecuencias—.

Me aparté de Pedri para leer el mensaje. Mire a Pedri que me estaba mirando y le enseñé en mensaje. Ese número en mi teléfono no estaba guardado pero en e, de Pedri si, y era Camila.

—Es Camila—. Me dijo Pedri enseñando en mismo número.

—Esta y yo las vamos a tener—. Le dijo yo a Pedri.

—No lo voy a arreglar yo—.

Pedri cogió mi móvil y salió de los vestuarios.

*

NARRA PEDRI.
A Sofia le dolía verme así con mi mejor amiga, la verdad es que ella se pasaba, yo sabia que Camila coqueteaba conmigo y también sabía que no le gustaba que Sofia y yo estuviésemos de novios.

Sofia me había llamado para ir a hablar con ella, estábamos hablando cuando empezó a llorar, Sofia no era de llorar fácil, no cualquier cosa le dolía, pero a ver entrado un poco en el juego de Camila y haberla puesto el brazo por encima y no defender a Sofia, le había dolido demasiado, estabamos abrazados, por que estaba intentando consolarla.

A ella le llego un mensaje amenazándola y era Camila, el número de teléfono era el de Camila.

Así que no iba a dejar que amenazaran a mi novia, y fui a terminar mi amistad con ella, y me daba igual que estuviesen mis padres delante.

*

Salí de los vestuarios con mi móvil y el de Sofia y fui hasta ella.

—Camila, no amenaces a mi novia, ella vale más que nuestra amistad—.

—¿Que?—. Dijo ella haciéndose la extrañada.

—¿No sabes lo que digo?—. Y después de eso le enseñe en mensaje con la amenaza y el número, y por mi móvil enseñe que era su número.

—Pedri y-yo—.

—Tu nada, no vuelvas a hacer de menos a mi novia—.

*

Después de eso se fue y Sofia salio de los vestuarios.

—Perdóname morena—.

—No pasa nada canario—.