Locura en ascenso [Hurrem vs Mihrimah]

Mehmet Bey

18 años después de la muerte de la Sultana Hurrem. Una mujer cuyo nombre habia quedado en la historia cómo una traidora y demente.
La cual su cadáver fue arrojado en un pozo en un lugar donde solo el Sultán Soleiman conocía.

Tan grave era el asunto que se prohibió volver a usar el nombre "Hurrem" en las niñas.

Un hombre que fue adorado por su pueblo y conocido por ser el protagonista de un gran amor junto a Firuze. Dos dinastías antes enemigas ahora unidas.

Y segundo amor del imperio tiene el nombre de Mihrimah Sultana y Ibrahim Pasha. Por más asco que me resulte la idea, ahora son mis padres.

Mihrimah pensó que al acusarme con el Sultán y ejecutarme se iba a librar
de mí. No.
Ahora no soy Hurrem.
Soy Mehmet Bey.

En el cuerpo de este chico me encargué de actuar cómo alguien amoroso, amable y fuerte. Creo que he logrado que ninguno de mis padres y mi hermana sepa que soy Hurrem.
Pero sé que en el fondo Mihrimah sospecha algo.

Mihrimah: ¿Hijo estas bien?

Mehmet: Si, madre.

Mihrimah: ¿No te dolio la caida que tuviste en esgrima?

Mehmet: Si, pero no es grave.

Mihrimah: Le dije a Ibrahim que no fuera tan bruto contigo.

Mehmet: Él no lo hizo a propósito.

Mihrimah: Lo sé, pero no quiero verte herido.

Mehmet: Estoy bien, ya pasó.

Ayse: Hermano, me alegro que estes bien.

Mehmet: Gracias.

Ibrahim Pasha entro a los aposentos y le dio un beso a Mihrimah.  Después acarició la cabeza de su hijo.

Ibrahim: ¿Cómo está mi León?

Mehmet: Perfectamente bien.

Mihrimah: ¿Pasa algo?

Ibrahim: Llego está carta del Palacio.
No la leí aún.

Mihrimah agarro la carta y mientras la leía sus ojos se llenaron de lágrimas.
Soltó el papel y se puso a llorar.

Ibrahim: ¿Qué pasó?

Mihrimah: Mi padre murió.

Ibrahim: ¿Qué?

La pareja en lágrimas se abrazó.
Ayse se sumo al abrazo y yo obviamente no me iba a quedar atrás.
Mientras abracé a mi familia no pude evitar sonreír por la noticia.

Me libere de ese bastardo

Esa misma noche todos fuimos al Palacio para asistir al funeral del desgraciado.
Todos estaban tristes o llorando.
Aunque no lloré si me mostre triste.

Después del momento eterno de tomar café y fingir tristeza Mustafa, Selim y Bayaceto se acercaron a Mihrimah para consolarse.

Ayse también presentó sus condolencias a Bayaceto, pero habia algo raro.
Sus miradas no eran precisamente amistosas. Habia un brillo extraño.

Mehmet: Hermana.

Ayse: ¿Qué?

Mehmet: ¿Hay algo que tenga que saber?

Ayse: No, nada.

Mehmet: Está bien....

Le di una palmadita en el hombro y me senté al lado de Ibrahim Pasha.

Ahora que el trono quedó vacío Selim y Bayaceto se miraban cómo dos depredadores salvajes. Mustafa de la incomodidad se alejo de ellos.

No puedo creer que siendo adultos sigan comportando cómo niños

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Estaba tranquilamente durmiendo cuando un grito de Mihrimah me despertó. Rápidamente me levanté y fui hacia donde se produjo el ruido.

Abri un poco la puerta y vi el cadáver de Firuze colgando en medio del harén.
Antes hubiera dado la vida entera por verla muerta.  Bueno, literalmente.
No quitaba la satisfacción de la ocasión.
Mihrimah llorando a sus pies lo hacia más divertido.

Ya no tendré que preocuparme por esa serpiente

Regrese a mis aposentos y al cerrar la puerta solté una carcajada siniestra que hizo eco en las paredes.
Retome la compostura y salí al balcón.

Cuando era Alexandra al rosa al llegar a lo primero que se me cruzo por la mente fue...

Este lugar es el infierno

Al pasar a ser Hurrem y amar al sultán Soleiman pensé

Ahora este Palacio será mi hogar

Pasé por la traición no solo de el Sultán también por mi hija.
Haber sacrificado a mis hijos y ahora tener una nueva vida e identidad,
Lo único que suena en mi cabeza es...

Haré de mi hogar el mismo infierno
Y todos los que le hicieron daño
Arderán en él.

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