Apache // La china

Cap: 28

Narra Micaela:

-- Hija! -- me llamo mi papá desde el comedor, pero no respondí nada.

Seguía enojada con él al igual que con mi hermano, pero no tanto, lo que pasó, paso y nadie lo puede cambiar.

-- Quiero hablar con vos -- entro a mi pieza sin avisar.

-- De que? -- pregunté seca.

-- Perdón por lo de trenza, pero me agarró tanto odio escuchar que por culpa de él, Jonny te llevo --

-- Yo, más que nadie, se que nunca fue su intención hacerlo, por qué lo conocia mucho más que vos, estaba celoso del uruguayo, por eso lo hizo --

-- Pero mira si cambiada de opinión y nos terminaba de vender a todos --

-- Colombiano! -- dije molesta, no quería que siga suponiendo cosas.

-- A lo que voy es que te pido que me perdones -- se sentó a mi lado -- no soy tu hermano y mucho menos el jefe de los negocios que llevan años haciendo, solo quería comportarme como un padre --

-- Y esa era la manera?, matar a Jorge frente a mi? --

-- No, no era la manera, estoy arrepentido por eso pero es algo que pasó y no puedo volver el tiempo atrás, la culpa es mía no de tu hermano, yo le hice señas de que dispare --

-- Por qué no me escucharon papá, les dije claro que no hagan nada --

-- Es que en ese momento estaba enojado y arto de verte mal por Jonny y cuando leíste eso me enoje peor, fue un impulso -- tomo mi mano -- perdóname y si no queres que siga acá lo voy a entender, agarro mis cosas y me voy --

-- No, vos te quedas acá, después de años de no verte no voy a dejar que te vayas de nuevo --

-- Entonces me perdonas? -- asentí dudosa y se abalanzo a abrazarme -- se que me mentis pero espero algún día puedas perdonarme de verdad, a mi y a tu hermano -- se separó -- voy a comprar bizcochos de los que te gustan, queres venir? --

-- Déjame que me termine de cambiar y voy -- asintió y se fue cerrando la puerta.

No sé si alguien más se lo hubiera tomado como yo el echo de que mi propia familia haya matado a mi novio, me seguía doliendo pero no puedo enojarme con ellos, son lo único que tengo.

-- Ya estoy -- salí al comedor -- buenas noches -- saludé a mi hermano que recién se estaba levantando.

-- Buen día enana -- volteo a verme y sus ojos estaban raros -- Que? --

-- Tus ojos, están rojos -- ya sabía por qué.

-- Culpa tuya, si anoche llegaste tarde --

-- A qué hora llego? -- pregunto mi viejo.

-- A las tres de la mañana -- mintió.

-- Mentira, llegue a las una pa --

-- Dónde andabas? --

-- En la casa de Doña Pascuala -- me hizo montoncito -- la mamá de Jorge --

-- Ah.. bueno vamos? -- asentí.

-- Ana viene? -- pregunte.

-- La tengo que ir a buscar pero si, por qué? --

-- Para comprarle los alfajores que a ella le gustan, ya que alguien llamando Fernando no le compra -- le di la espalda para irme con mi papá.

Cuando estábamos por cruzar la calle me hizo señas con su mano dando a entender que se la agarre para cruzar y así lo hice.

Parecía una nena chiquita yendo de su mano a comprar, pero a mí me gustaba, como pasamos tantos años lejos, creo que queria retomar todo ese tiempo perdido.