Im Stuck in a Crazy Drama

69.

"¡Shin Sera!"

Lee rowon, quien apartó a las personas que sacudían a la inconsciente Sera, la levantó y la abrazó. Seguramente le habían enseñado primeros auxilios, pero tenía la mente en blanco que no le venía nada a la cabeza.

"Hah, joder..."

Lee rowon, que recordó que debía hacer demasiado tarde, recostó a Sera boca arriba y le tomó el pulso. Afortunadamente, pudo sentirlo. Aliviado por ese hecho, levantó ligeramente el tobillo de ella, como una medida para dirigir el flujo sanguíneo al cerebro.

"¡Rápido, llamen a un médico!"

"Si, si...¡vicepresidente!"

En el caos repentino que se había formado, se escuchaban suspiros y murmullos de todo tipo. Normalmente, Lee rowon habría comentado sarcásticamente si esto era un espectáculo para mirar, pero esta vez centró toda su atención en Sera.

Por favor, por favor...

Fue una ferviente plegaria dirigida a nadie en particular.

"¡¿Dónde está el paciente?!"

Fue una suerte que se desplegaran guardias de seguridad y personal médico en preparación para cualquier posible accidente. Poco después, el personal médico del Hospital de Construcción de Seongwon colocó a Sera en una camilla y la trasladó a una ambulancia. El secretario Yu llegó corriendo a toda prisa y le dijo a Lee rowon.

"Me comuniqué con la secretaria de la vicepresidenta Shin, y me ha dicho que ira al hospital inmediatamente desde la empresa, así que ahora, vicepresidente...."

"Yo la voy a acompañar"

"¿Qué? Pero, vicepresidente..."

Aunque era el final del evento, aún se estaba sirviendo la comida y el ambiente era caótico. En esta situación, si el anfitrión no estuviera, se podrían haber intercambiado palabras innecesarias. Sin embargo, Lee rowon subió a la ambulancia sin dudarlo y le dio instrucciones al confuso secretario Yu.

"Termina el evento ahora y maneja este asunto para que no salga en las noticias"

Conociendo la personalidad de Lee rowon, el secretario Yu tragó un suspiro y bajó la cabeza.

"Entendido, vicepresidente"

Tan pronto como se cerraron las puertas de la ambulancia, un ruido ensordecedor llenó el ambiente.

"Ha..."

No fue hasta que estuvieron fuera de la vista de las persona que sintió una oleada de alivio. Lee rowon apretó y aflojó repetidamente su puño hormigueante. No se había dado cuenta, pero todo su cuerpo estaba empapado en sudor frío. Luego de unos minutos, uno de los médicos le dijo.

"Afortunadamente, su respiración es buena. ¿Tiene alguna anemia preexistente o ha experimentados síntomas de síncope vasovagal?"

"Bueno..."

Devanándose los sesos, Lee rowon buscó en sus recuerdos del pasado.

Recordaba la vez que había salido a dar un paseo nocturno y se había encontrado a Sera tirada en el jardín. Se había sorprendido y sentido pánico en ese momento, pero sus emociones no habían sido mas que una sensación universal de desconcierto, aun incluso si hubiera sido otra persona.

El terror que sintió ahora era parecido a la muerte misma, una emoción que nunca antes había experimentado.

¿Por qué volvió a desplomarse después de haber estado bien durante un tiempo? Era una mujer débil que, a pesar de todo, no sabía cuidar de sí misma y se desmayaba con frecuencia. Por eso, al menos él debería haber prestado atención a su estado de salud.