스물넷

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NamJoon se fue esa noche, prometiendo regresar pronto en caso de que lo necesitaran. TaeHyung estaba feliz de que hubiera venido, pero también feliz de que se fuera de nuevo. Él y SeokJin necesitaban espacio y no necesitaban al hermano sobreprotector de TaeHyung sobre sus hombros. TaeHyung preparó la cena mientras SeokJin revisaba a la manada, luego él y SeokJin comieron juntos.

—Esto es genial —dijo SeokJin, habiendo devorado la mitad de su plato en cuestión de minutos.

—Hay segundos en el horno —dijo con una sonrisa de complicidad.

—Luna llena esta noche —dijo SeokJin entre bocados.

—Oh. ¿Eso significa que tienes que volver pronto?

SeokJin se echó hacia atrás, sonriéndole serenamente.

—No. La necesidad de cambiar es un poco mayor alrededor de la luna llena, pero no abrumadora. ¿Y tú? ¿Las fases de la luna afectan a las sirenas?

—Sí, pero no de la manera que podría pensar. Afectan a las mareas, lo que nos afecta a nosotros. O al menos, así lo explicó mi papá.

SeokJin parecía estar trabajando en algo, luciendo inseguro mientras miraba a TaeHyung.

—¿Crees que podría verla? —preguntó finalmente.

TaeHyung le devolvió la mirada, desconcertado.

—¿Ver qué?

—Tu forma de sirena. Tú has visto a mi lobo.

TaeHyung lo había hecho y deseaba volver a verlo. Pero nunca antes le había mostrado a nadie su forma de sirena.

—¿De verdad la quieres ver?

—Por supuesto. ¿Qué parece? ¿Algo espantoso, todo escamas y baba? — bromeó el alfa.

—No, por supuesto que no —bufó, exasperado—. Solo... podría ser mucho si nunca lo has visto antes. Y solo puedo cambiar en el agua, así que...

—Puedo soportar mojarme —insistió SeokJin—. Y, dejando de lado las bromas, realmente quiero verla.

—¿No huirás gritando?

—¿La gente suele hacerlo?

—Nadie nunca...

—Ah, ya veo. —SeokJin se inclinó sobre la mesa y tomó su mano—. No huiré, lo prometo. Sin gritos. ¿Quizás un grito varonil?

Sus palabras provocaron la risa de TaeHyung, aliviado de que el alfa no se sorprendiera por sus advertencias.

—Entonces, ¿me la mostrarás? —SeokJin presionó suavemente.

—Solo si me prometes otro vistazo de ese hermoso lobo escondido dentro de ti.

FORBIDDEN, jintae. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora