Atsumu y Kiyoomi se conocen en el campamento de entrenamiento, y al momento de cruzar sus miradas, sienten un gran chispazo en sus cuerpos.
Descubren que son destinados, y comienzan su estable y adorable relación. Donde Kiyoomi es muy débil ante la...
Atsumu y Kiyoomi se conocieron en... malas circunstancias, podría decirse.
Obviamente, se conocieron en el campamento de entrenamiento hace más de dos años. Pero antes de que Atsumu saliera con su adorable Omi, hubo otro alfa, que supo como romperle el corazón.
Atsumu salía con un alfa, Yuuta Nagisa. El típico chico popular de la secundaria, el que tenía a todas las omegas enamoradas y suspirado por él, y un claro ejemplo era el rubio.
Quién siempre lo miraba por los alrededores del colegio. Se la pasaba hablando de lo muy enamorado que estaba de ese alfa. Recibiendo burlas de sus amigos, diciéndole que al ser un omega hombre jamás lograría captar su atención.
Pero, para sorpresa de todos, Atsumu logró que el Yuuta se fijara en él. O eso era lo que el omega creía.
El chico juraba amar a Atsumu, que era el omega de sus sueños, la persona que siempre esperó, su todo.
Atsumu creyó eso por más de un año.
Un día caminando por los pasillos, escuchó un ruido algo extraño en un salón vacío, por lo que se acercó a ver qué ocurría.
Sintió como su corazón dejó de latir por un segundo, seguido de que infinitas lágrimas llenaran sus ojos.
Yuuta estaba follándose a una omega.
Solo salió corriendo de ahí, sin decir nada, sin pelear por lo que creía suyo.
Faltó al colegio por más de una semana, incluídas las prácticas al club de voleibol, donde no recibió mas de dos mensajes de Yuuta. Se sentía enfermo. Se sentía vacío.
Osamu siempre estuvo ahí para él. Reconfortándolo cuando lo único que podía hacer era llorar hasta el cansancio. El peligris lo obligaba a comer, ya que no tenía ganas de absolutamente nada.
Un día, ya cansado de sentirse así de miserable, decidió citar al alfa. Acordaron el día, lugar y fecha.
Atsumu necesitaba respuestas.
Llegado el día, Atsumu se vistió con ropa casual. Realmente cómodo, solo iría ahí, aclararía las cosas y volvería a casa. Salió de casa y se dirigió a una cafetería cerca del perímetro del colegio.
Cuando llegó al lugar, eligió una de las mesas más alejadas, hasta atrás. Y solo se dignó a esperar. Lo que hizo por el resto de la tarde. Yuuta nunca se presentó al lugar. Lo había dejado plantado.
Atsumu regresó a casa con grandes lágrimas queriendo abandonar sus ojos. Pero se negó a seguir llorando por ese estúpido alfa. Su gemelo le preguntó qué fue lo que pasó, algo alarmado al ver al rubio con la cara roja y rastros de un pequeño llanto.
- Yuuta no fué. Me dejó plantado. Y no me resonde los mensajes. - Se acercó al alfa, pidiendo un abrazo, mientras se dignaba a soltar un largo suspiro de cansancio. Se quedaron abrazados por unos largos minutos. Osamu comprendió lo trsite que se debía sentir Atsumu.
Al día siguiente, Atsumu llegó al colegio decidido. Terminaría -lo que sea que tenga- con Yuuta.
Se lo cruzó por un pasillo antes de entrar a un salón, y vió como detrás de él venía la misma omega de la otra vez.
- Yuuta. - Se acercó a él, captando su atención al instante. Y una sonrisa -falsa- se hizo presente en el rostro del alfa. Estúpido idiota.
- Tsumuu... ¿qué ocurre, bebé? - El alfa se acercó a su rostro, tratando de besar al omega. Pero lo único que besó su rostro fue la palma de Atsumu. El omega le dió el cachetazo de su vida. Dejándolo un poco atontado, y visiblemente humillado. Mucha gente estaba cerca, así que varios logararon ver lo que ocurrió.
- Eso te pasa por burlarte de mí, enfrente de mi cara. ¿Te creés que soy idiota o algo así? Te vi follando con ésta en un salón. Vete a la mierda Yuuta. No vuelvas a buscarme jamás.- Atsumu se largó del lugar, dejando a Nagisa completamente rojo, de la vergüenza y la ira. Mientras la omega salía corriendo de ahi, avergonzada ante toda la gente presente.
El rubio corrió hasta el tercer piso, dirigiéndose al salón de Osamu. Necesitaba contarle a su hermano lo que pasó.
Lo encontró platicando con Suna, su omega. Ya que ambos estaban juntos, decidió contarles a ambos lo ocurrido. Sin poder evitar que grandes lágrimas salieran de sus ojos. Siendo reconfortado por la pareja, en un lindo abrazo.
En ese momento se sintió feliz, después de muchos días.
Luego de calmarse un poco, decidió que quería irse a casa. Solo llamó a su mamá para que lo recogiera y en diez minutos ya estaba refugiado en su nido. Abrazando a Tori.
El invierno se acercó, y con eso las vacaciones se hicieron presentes. Dándole un gran respiro al rubio. Necesitaba despejar su mente.
Se pasó las vacaciones comiendo lo que Osamu preparaba para él, viendo miles de películas todo el día, y torturando a su hermano por la noche, contándole sobre algunos de los libros que leía en el teléfono.
Al hacer todo eso, el receso de invierno se le pasó volando, teniendo que volver al colegio, desgraciadamente.
No vió a Yuuta por ningún lado en semanas. Lo cual fué un gran alivio, que jodan a ese idiota.
Se centró mucho más en las prácticas. Eso ayudaba a curar el estrés que cargaba.
Hasta que un día el entrenador le dijo que lo habían invitado al campamento de entrenamiento juvenil. Casi saltó de la emoción cuando se lo dijieron, saltando alrededor de su gemelo, alardeando de que solo a él lo habían invitado. Recibiendo un codazo en sus costillas por parte del alfa.
Atsumu estaba tan emocionado, que esa noche casi no pudo dormir. Dió vueltas en la cama toda la noche.
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grrrr oli como están
omg q lindo q los números de vistas sigan subiendo me siento felis de k si lean mi fic :'''vv todavía no me lo creo chaval omg
la pregunta del dia de hoy esssss ¿cual es su personaje BIEN FAVORITO de todo haikyuu?
el mío siempre va a ser Tendou i love you my bbgrl 🥰😍🤤😝🥵🥰👹🥺💞
