CAPITULO 5: Promesas en el oceano

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Greg salía por las noches en su bote en búsqueda de Ariel, aunque sabía que tenía muy pocas posibilidades, por no decir que era casi imposible. Pero no muy lejos, Sebastián y Flounder, quienes de vez en cuando iban a vigilar el barco del príncipe Erik, notaron la figura solitaria de Greg remando saliendo del muelle.

**Flounder:** (susurrando) "¡Sebastián, míra! Es Greg!!"

**Sebastián:** (voltea a ver y lo reconoce asombrado) "Quizas está buscando a Ariel, ven vamos"

Decidieron acercarse sigilosamente al bote de Greg, mientras él continuaba remando, sumido en sus pensamientos, de repente vió una sombra moverse en el agua.

**Greg:** (deteniéndose) "¿Ariel? ¿Eres tú?"

Para su sorpresa, emergieron Sebastián y Flounder, mirándolo con una mezcla de curiosidad y cautela. Greg soltó los remos y se inclinó hacia ellos, reconociéndolos al instante.

**Greg:** (sorprendido y esperanzado) "¡Sebastián! ¡Flounder! ¿Dónde está Ariel? ¿Está bien?"

**Sebastián:** (mirando a Greg que estaba preocupado por su amiga) "A dónde vas? ¿Qué haces aquí en medio de la noche?"

**Greg:** (con desesperación) Necesito saber si Ariel está bien. No he dejado de buscarla desde que... desde aquella noche."

**Flounder:** (con una mirada triste) "Ariel está muy triste. A llorado por ti, no te a olvidado y también quiere verte"

**Greg:** (más aliviado y esperanzado) "No debí romper nuestra amistad, Su hermana, Aquata, me dijo que la castigarían severamente si continuábamos viéndonos."

Sebastián y Flounder intercambiaron miradas, comprendiendo la sinceridad en las palabras de Goyo.

**Sebastián:** (suspirando) "Entendemos que querias protegerla, Ariel es nuestra amiga y queremos lo mejor para ella."

**Greg:** (con determinación) "Lo sé, y lamento haberla lastimado. Necesito verla y decirle cuánto la extraño y pedirle perdón."

Sebastián y Flounder se sumieron en un breve silencio, viendo que Greg todavía era alguien en quien confiar y que no tenía malas intenciones.

**Sebastián:** "Muy bien, Greg. Te ayudaremos, pero debes prometer que serás cuidadoso, recuerda que nadie más debe enterarse. Nosotros también, porque si su padre él rey Tritón se entera, podría ser desastroso para todos, se supone que yo soy responsable de Ariel ."

**Greg:** (con gratitud) "Lo prometo. No haré nada que ponga en peligro."

Comenzaron a trazar un nuevo plan para encontrarse con Ariel, mencionaron un sitio de encuentro seguro donde podrían hablar sin ser descubiertos.

**Flounder:** "Ya sé! Conozco un lugar muy alejado y quieto. Hay una cala escondida más allá de la playa. Es difícil de encontrar, pero es seguro."

**Sebastián:** "Iremos allí mañana por la noche

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**Sebastián:** "Iremos allí mañana por la noche. Pero recuerda, Greg, debes seguir siendo muy cauteloso, confiamos en tí, no nos falles. No queremos problemas."

**Greg:** (asintiendo con determinación) "Lo seré. Gracias, Sebastián. Gracias, Flounder. Prometi que haré todo lo posible por enmendar las cosas."

Después, Sebastián y Flounder nadaron rápidamente hacia el palacio bajo el mar de Atlántica, sus corazones latiendo con fuerza por la emoción y la urgencia de llevar las noticias a Ariel. Cuando finalmente llegaron, encontraron a Ariel y Aquata en su habitación.

**Sebastián:** (jadeando, tratando de recuperar el aliento, se acercó a Ariel y Aquata, siendo muy discreto les pidió platicar con ellas) "Tenemos noticias importantes."

Ariel y Aquata, estaban por dormir, se levantaron y fueron a otra habitación a platicar con Flounder y Sebastián.

**Ariel:** (ansiosa) "¿Qué pasó, Sebastián, Flounder? Digannos"

**Flounder:** (hablando en voz baja) "Ariel manten la calma... encontramos a Greg cuando estaba remando solo en su bote, buscándote. Hablamos con él y está muy triste y arrepentido por haberte lastimado."

Aquata, que había estado escuchando

**Aquata:** (con cautela) "¿Qué dijo exactamente?"

**Sebastián:** "Se veía triste. Nos dijo que no deja de pensar en Ariel, quiere verla, saber como está, pedirle perdón por haberla lastimado y haber roto su amistad"

**Ariel:** (conmovida) "Deveras me extraña! Yo también quiero verlo, ¿Qué pasó después?"

**Flounder:** "Le dijimos que lo ayudaríamos a verte. Planeamos un encuentro para mañana por la noche en una cala escondida."

**Sebastián:** (mirando a Aquata) "Sabemos bien las leyes del reino, pero creemos que merece la oportunidad de enmendar las cosas. Qué les parece?"

Ariel estaba visiblemente emocionada, una sonrisa se extendía por su rostro mientras abrazaba a Flounder y a Sebastián.

**Ariel:** (emocionada) "¡Gracias, chicos! No saben cuánto significa esto para mí."

Aquata, aunque todavía preocupada, vio la felicidad en el rostro de su hermanita y se sintió aliviada. Sin embargo, su deber como hermana mayor seguía pesando en su mente.

**Aquata:** (seria) "Ariel, sé que estás feliz, pero debemos ser extremadamente cuidadosas. Recuerda que no deben enterarse papá ni nuestras hermanas de esto o entonces sí estaremos en serios problemas."

**Ariel:** (asintiendo, todavía sonriente) "Lo sé, Aquata. Prometo ser cuidadosa. Pero tengo que verlo, necesito escuchar su explicación."

**Sebastián:** "Está decidido entonces. Mañana por la noche, iremos contigo a la cala para asegurarnos de que todo esté bien."

**Ariel:** "¡Gracias, Sebastián! No podría pedir mejores amigos."

Aquata se acercó a Ariel y la abrazó con fuerza, deseando protegerla de cualquier daño, pero también entendiendo la necesidad de Ariel de resolver sus sentimientos.

**Aquata:** "Está bien, Ariel. Te apoyaré en esto. Solo promete que serás prudente y que no tomarás riesgos innecesarios."

**Ariel:** (con gratitud) "Lo prometo, Aquata. Gracias por entender."

Tierra y mar: la historia de La Sirenita y un forasteroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora