AIDEN
No debería haber reaccionado así, pero es que me pone de los nervios.
Sé que no me lo ha contado todo. Soy consciente de que se ha tragado la parte en la que aparece su hermano. Pero aún así... pensaba que mi historia había sido dura, pero la suya...
Pobrecita.
Y aún por encima tiene que aguantar reacciones como la mía con una sonrisa. Cuando la abracé y le cogí de la mano, sentí algo... que no soy capaz ni de explicar. Odio que se sienta así. Cuando estábamos abrazados sobre su cama, hablando de su pasado, me di cuenta de que logró quitarse la máscara, aunque no me contara lo de su hermano, lo consiguió. Lo que pasa es que cuando comenzamos a hablar de Anne se la volvió a poner.
Decido que iré a la noche de pelis para poder hablar con ella. Por intentar disculparme no pierdo nada.
Me visto rápido y peto en su puerta.
Me abre la muchacha coreana:
- Hola, cielo. ¿Vienes a buscarme? Estoy lista en nada, que la peli empieza en quince minutos.
¿En serio? ¿Acaso no se da cuenta de no todo lo que ocurre gira en torno a ella?
- En realidad... venía a recoger a Hannah. ¿No está aquí?- Pregunto intentando pasar, ella me lo impide. De repente su expresión se convierte en una de ira.
- ¡Si! Claro que si. ¡Hannah!- La chica de ojos violetas aparece frente a ella.- Tu novio te llama.
Gen empuja a Hannah afuera de la habitación y le cierra la puerta en toda la cara.
- Aiden...- me mira a los ojos.
- Hannah. Siento...
- Debes irte... mira. Haremos una cosa.- Me coge de la mano y me lleva a dentro de mi habitación, antes había dejado la puerta abierta. Se sienta sobre mi cama y yo me siento a su lado.
- ¿Qué pasa?- Su actitud me tiene desconcertado.
- No debes venir a verme. No si está Gen. Le diré que venías a preguntarme una cosa sobre lo de las pelis.- Estoy a punto de interrumpirla cuando me pone un dedo sobre los labios.- Y, también le diré que te gustaría ir con ella mañana al pueblo. No hay opción de rechistar. Hablaremos luego, durante la peli.- Se levanta y camina hacia la puerta.
- Hannah...- ella se voltea y me mira a los ojos.
- Dime.
- ¿Qué es eso del pueblo?- Ella sonríe.
Que bonita es su sonrisa.
- Cada sábado. Si aprobamos todo y no tenemos ningún lío, podemos ir al pueblo. Debemos llevar cosas que hacemos durante la semana para vender. Así conseguimos aquí el dinero. Con lo que conseguimos, podemos comprarnos ropa, chuches, cosas para la habitación... lo que queramos. Y también podemos ir al cine y así. Nos llevan en bus y a las siete u ocho pasa otro a recogernos para volver aquí.
- Que guay. Sólo que... yo no quiero ir con Gen. Quiero ir contigo.
Noto como sus mejillas se colorean ante mis palabras.
- Bueno... podemos ir los tres. Diré que es porque me lo han pedido los profes, al ser tu guía. Pero iré con una condición.- Y sonríe. Me pregunto que será.
- ¿Cuál?
- Debes pedirle tu a Gen si podéis ir juntos al pueblo, pero debes decirle que yo también voy.
- Está bien.- Resoplo.- Pero luego, durante la peli, debemos hablar. Siento mucho lo que pasó hace un rato. No debí reaccionar así.
- No pasa nada.- Me sonríe con tristeza.- Nos vemos ahora.
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Nos vemos detrás del arcoíris
LosoweNo lo entendía. En todas las películas y series siempre ponían los orfanatos como lugares oscuros, con gente cruel y rota. Lo que ella no sabía es que por mucho que aparentemente todo fuera genial y todo pareciera perfecto, las personas huérfanas ne...