Ultraviolencia

cap 17

Dabi no se mueve de su lugar en la habitación de Shouto y eso solo sirve para enojarlo más a medida que el tiempo pasa en oleadas lentas y constantes, pero para Shouto, se siente como si todo se hubiera congelado y roto a la vez. Nunca había sentido una punzada de traición tan poderosa como esta, nunca desde que descubrió que Dabi es en realidad su hermano perdido hace mucho tiempo, Touya. No quiere nada más que Dabi deje su vida para siempre y nunca regrese. Esto ha ido demasiado lejos para él. ¡No puede creer que haya hecho todo lo posible para lastimarlo de esta manera, todo para lograr que se doblegue y se quiebre a su voluntad, todo para poder obtener la enfermiza satisfacción de admitir la derrota!

Pero ¿qué otra cosa podía esperar de un villano? En realidad, era increíblemente tonto e ingenuo por haber confiado en él en primer lugar, sin importar cuán pequeña fuera esa confianza. 

“Ya terminé. No te metas en mi vida. Ya no necesito esto ni a ti. Ahora tengo a Johann y puedo solucionar esto”.

Dabi se burla de esto, entrecerrando los ojos, "¿Cómo planeas hacer eso? Es tan puto como parece, y honestamente no tengo idea de por qué estás considerando la idea de quedarte con él ahora mismo. ¡Te engañó, Shouto! ¿No tienes ningún respeto por ti mismo en ti para al menos decir que mereces algo mejor que este pedazo de mierda?"

"Hablaré con él y averiguaré qué le dan estos otros chicos que yo no le haya dado ya", explica Shouto con toda la calma que puede, dado lo molesto que está con Dabi, que se niega a irse por alguna razón u otra, "Johann no es alguien que haría una maniobra como la que acabas de hacer con el único fin de ganar un juego retorcido. Él nunca me habría hecho daño de la forma en que lo acabas de hacer, así que no vayamos por ese camino".

—¿Estás más enojada conmigo por mostrarte que él te engaña a ti en lugar del infiel mismo? Tienes que estar bromeando, Shouto. Dabi responde con ojos atónitos: —No hice nada malo. ¡Él es quien te engañó! No lo entiendo, ¿estás tan desesperada y patética como para creer realmente que de alguna manera no es culpable de todo esto? No necesitas darle nada más de lo que ya le has dado. No debería amenazarte con dejarte o engañarte en primer lugar porque no se sale con la suya, o se pone de mal humor como el perra que es.

Desesperado y patético son los dos peores adjetivos que Dabi podría haber usado para describir a Shouto. Como si Shouto no necesitara más razones para estar enojado con Dabi por tratar todo esto como un maldito juego, tuvo que irse y llamarlo con esas dos palabras: desesperado y patético. 

Así es como lo ve, ¿eh? ¿El hermano que dice amarlo tanto? Johann puede atacarlo, usar su don en él, engañarlo, descuidarlo y amenazarlo con dejarlo, pero nunca, jamás, usaría ese lenguaje para describirlo. Porque Johann realmente lo ama... a diferencia de Dabi.

—Eso es todo lo que me ves, ¿eh? Desesperado y patético —susurra en respuesta antes de que su voz se vuelva más audible y le dé la espalda a su hermano—. Está bien, Touya, estoy desesperado y soy patético. ¡Estoy jodidamente desesperado, patético, inútil, inútil y horrible! ¿Estás feliz ahora? ¿Estás satisfecho contigo mismo ahora que finalmente admití ser todo lo que ves en mí?

“Sé que valgo menos que la persona promedio, ¡siempre lo he sabido! No necesito que alguien que dice amarme, pero que nunca debe haberme amado en absoluto, me llame desesperada y patética para que vaya más allá y me demuestre lo inútil que soy para mi propio novio”.

Dabi se queda en silencio por unos momentos y cuando Shouto escucha el sonido de pies arrastrados, espera poder irse de una vez por todas porque no quiere volver a verlo ni hablarle nunca más.