Ultraviolencia

cap 4

Aizawa se había acercado a Shouto después de escuchar la voz de su estudiante y la voz de un villano que claramente era la de Dabi en el callejón por el que casi había pasado de camino a casa. El villano se había separado de Shouto con un muro de llamas, y se había escapado en la noche sin ninguna forma real de rastrearlo. Los ojos de Aizawa se posaron inmediatamente en Shouto y le preguntó: "¿Estás bien?"

Shouto asiente y exhala un suspiro tranquilizador: "Estoy bien. Necesito irme. No quiero que mi papá se enoje porque llegué tarde a casa".

Aizawa está a punto de dejarlo ir cuando le pregunta: "¿Qué te estaba haciendo?"

"Nada."

“¿Cómo te hiciste ese moretón en la cara?”

Shouto tiene una mentira a mano en caso de que surja la pregunta: "Accidente de entrenamiento con mi padre. ¿Puedo irme a casa ahora?"

—Claro. Pero ten cuidado, ¿vale?

"Seré." 

Shouto se fue después de esta conversación. Su mente estaba atrapada en un pensamiento, su cuerpo estaba trabajando en piloto automático y entonces su teléfono vibró, recordándole que lo revisara para ver si había algún mensaje. 

Se sintió relajarse por un momento antes de que su mente pudiera pensar en lo que el villano había dicho antes de irse. Revisa su teléfono, sintiendo que su corazón se hunde en su pecho mientras lee el mensaje de texto.  Me alegro de que la hayas pasado bien esta noche, pero la próxima vez, por favor, no te vayas tan tarde. No puedo soportar que estés lejos de mí por tanto tiempo. 

Me aseguraré de rechazar la oferta de pasar el rato después de la escuela la próxima vez que me lo pidan. Lamento haberte preocupado.

No hubo una respuesta rápida, lo que hizo que Shouto se tragara un nudo nervioso en la garganta por lo que podría pasar cuando regrese a casa y se enfrente a su novio. 

Sí, para sorpresa de todos, Shouto es gay y tiene novio. Mientras que sus otros amigos están obsesionados con las chicas, él tiene novio. Un novio con los ojos azules más hermosos del invierno (que se vuelven más fríos que la nieve del invierno cuando está enojado), un cuerpo alto y fuerte (que le deja profundos moretones cada vez que no están de acuerdo) y un cabello plateado que brilla intensamente a la luz (también brilla en una habitación con poca luz donde Shouto no puede moverse ni hablar mientras es violado una y otra vez).

Cuando conoció a su novio actual, no sabía cómo sería empezar una relación con él ni cómo afectaría a su vida en todos los sentidos imaginables... No, pensó que había tenido suerte por primera vez en su miserable vida. Nunca imaginó que el sexo con un hombre de palo sacudiría su mundo en todos los sentidos imaginables. 

Shouto conoció a Johann Saito cuando Natsuo llegó a casa de la universidad para visitarlo. Shouto no sabía qué pensar de su hermano, pero sí sabía lo que pensaba del joven alto y musculoso que estaba en la sala de estar con su hermano.

—Natsuo, ¿quién es? —le preguntó a su hermano mientras intentaba no mirar abiertamente al joven.

—¡Ah, Shouto, hola! —lo saludó Natsuo con una sonrisa tonta—. ¡Éste es mi compañero de dormitorio y mejor amigo, Johann! Es mitad holandés y mitad japonés, ¿no es genial? Es mitad de dos cosas, como tú.