Ultraviolencia

cap 5

La primera vez que Johann lo golpeó, había sido durante su tercer mes de noviazgo, un mes después de que su padre se enterara de su relación. Shouto se había sentido bastante molesto por haber sido él el elegido para gestar a su potencial futuro hijo, pero como su padre había dicho: “Si quieres ser la perra sumisa de algún hombre, entonces harás como una buena perra sumisa y te descalzarás y quedarás embarazada después de cumplir tu propósito de superar a All Might”.

Cuando le expresó su enojo a Johann por la situación, el otro respondió con un comentario sarcástico que llevó a un pequeño desacuerdo entre los dos. Shouto ni siquiera recuerda qué se dijo ni cómo había llevado a eso, pero no estaban discutiendo. Simplemente fue un pequeño debate que se agrió cuando Johann se frustró con él y en lugar de levantar la voz, Johann levantó el puño y lo golpeó en la cara.

Ahora, para Shouto, no hubo llanto, conmoción o incluso un momento de miedo. No huyó ni empezó a asustarse. En cambio, se encogió de hombros como si nada hubiera pasado y él estuviera bien. Johann no se disculpó ni le hizo un gran gesto para mostrarle su arrepentimiento por lo sucedido. Se quedaron en silencio después de que el golpe le diera en la cara. Días después, simplemente no hablaron de eso.

Cada vez que había ocurrido ese primer golpe, Shouto se encogía de hombros. Para ser honesto, cada paliza y estrangulamiento en su contra en realidad no duele. Años de ser criado por su padre y su entrenamiento estricto y sádico han dejado a Shouto con una tolerancia al dolor más alta que la mayoría. Esto se demostró en el Festival de Deportes cuando recibió varios golpes directos de Midoriya y pudo recuperarse para seguir luchando sin tanta tensión en sus músculos. El dicho "me golpeó y se sintió como un beso" se aplica perfectamente a cómo se siente cada vez que Johann lo golpea, lo patea, lo pisotea o lo estrangula.

Esto y Shouto piensan que la forma en que están en desacuerdo es de alguna manera… normal, esperable y, de una manera extraña… saludable.

Johann no lo insulta. Los golpes de Johann no lo lastiman. Cuando Johann lo ataca, es solo para desahogar las frustraciones que siente contra él. Estos hechos por sí solos hacen que la relación sea mucho más saludable que la que tenían sus padres.

Los golpes y palizas de su padre habían dañado gravemente a su madre. Sus crueles palabras hacia ella destruyeron su autoestima. Siempre, siempre estallaba en una discusión que siempre se volvía demasiado ruidosa y terminaba con su madre rogando por misericordia. Lo que tenían era abuso. Lo que tenían era insalubre. Lo que Shouto tiene con Johann no es abuso. Lo que Shouto tiene con Johann no es insalubre.

Al menos Johann y él no discuten hasta la medianoche. Al menos Johann no lo insulta verbalmente. Al menos Johann nunca lo dejó con la sensación de que iba a intentar matarlo. No, lo que tienen es sano y no abuso.

Como siempre tiene presente este conocimiento, nunca necesita que Johann se disculpe por las palizas que le han dado y que no le duelen (si es sincero, los moretones duelen más que las palizas). Gracias a este conocimiento, puede despertarse en su habitación, sin que le afecte la paliza/estrangulamiento de la noche anterior, y puede entrar al comedor para disfrutar de una de sus dos comidas diarias con Johann en paz, sin ningún temor ni vacilación. También puede darle un beso de despedida antes de irse a la escuela, prometiéndole a Johann: "Volveré a casa después de la escuela. Adiós, Johann".

“Adiós cariño, te amo.”

Shouto sabe que podría estar equivocado, pero piensa que no, cree firmemente que ha encontrado el verdadero amor con Johann: "Yo también te amo".