Siempre seremos tú y yo (parte 2)

09

-¿Puedo pasar? -pregunté entreabriendo la puerta y apoyando mi cabeza en el marco de esta.

-Que me queda.

Su voz, el tono, tiempo que no la escuchaba dirigirse hacia mí así. No sabía si lo decía con resentimiento o tristeza disfrazada de enojo, pero..., como dolía escucharla de esa manera tan seca y poco amable... era como un cuchillo en mi corazón. ¿Por qué duele tanto?

Pase con la cabeza agachada y me senté a la orilla de la cama.

-¿Cómo te sientes?

-¡Increíble! ¡Estoy saltando en un pie!

-Sabes a qué me refiero. -me quería reír por su sarcasmo, ella siempre lo hacía. Joder como la extraño.

-No sé como sentirme ahora, tengo una esposo que me controla hasta que voy a comer, nos alejamos en nuestro peor momento y mí única esperanza era mi hija. -su voz se entre corto y sus ojitos se cristalizaron. Sabía que era sensible. No me imagino como debe estar. Quería tenerla entre mis brazos y que su cabeza esté mi pecho mientras acariciaba su bonito pelo y le decía que mientras esté conmigo todo iba a estar bien. -Y tengo miedo de perderla. Tengo mucho miedo, Sam.

-Ama... todo va a estar bien. -dije dándole la mano.

-¿Y si no? -contestó con lágrimas pidiendo salir. La mirada, esa mirada no la veía desde que me dijo que no diga nada. Tiene miedo, mucho miedo.

-Hola... -murmuró Ari acercándose y en automático Ámame quitó mis mano y se limpió los ojos para poner su mejor cara. -Sam, ¿podrías dejarnos a solas? - preguntó y miró con lo que parecía lástima a su hermana.

-Sí, claro.

Me paré para salí de la habitación y me fui con Óscar a la sala de espera.

Ama

-Hola Ari. -susurre dando palmadas para que se sentara a mi lado.

-Hola..., ¿cómo te sientes?

-Pues, no sabría qué decirte; lo que sí sé es que tengo miedo que le pase algo a Mara.
Ella es la única por la que me mantengo fuerte, ¿sabes? Perderla solo me traerá problemas, Abi.

-Ama... ¿tu quieres a Óscar? -suspiró pesadamente antes de hablar. ¿Qué quería?

-No, Abril. Jamás lo he querido y ni lo querré.

-¿Y por qué con él?

-Celos, Abril. Fue los celos por lo que me acosté con él.

-Amairani, yo te amo mucho. ¿Sí?

-¿Pero? -dije con una leve risa y media sonrisa.

-Ama... yo siempre voy a estar para ti, ¿sí?

-¿Qué pasa?

-Ama... perdiste mucha sangre y aún más cuando estabas por venir al hospital...
Mara no lo logró mi amor, lo siento. -susurró lo último mirando con sus penetrantes ojos.

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La puerta se abrió se cerró en un segundo.

Él psicólogo forense se sentó al frente de la arrestada y puso en marcha la grabadora.

-Samantha Rivera. ¿Por qué lo hiciste?

-No lo quería cerca de mi mujer.

-¿Por qué?

-No me agradaba la idea de que su encuentro fuera arregla si no había amor, lo mío con Abril también fue arreglado, pero había algo de amor que rescatar. Aparte, Amairani Garza es solo mía. -murmuró poniendo los codos sobre la mesa y ligeramente se hizo hacia adelante para decirle al psicólogo: "Ella siempre lo fue, es y será mía, nadie más que yo la puede tocar, señor, solo yo..."

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Me reí del comentario de mi hermana rezando que fuera una broma de mal gusto.

-¿Qué pasó con mi hija, Ari?

-Ama... no es broma. Ella no pudo aguantar... lo siento tanto...

Ari no espero y se sentó a mi lado para abrazarme.

Una punzada se apoderó de mi corazón, una punzada que jamás había sido tan intensa como ahora.

Mara, la única que me dio las fuerzas para vivir este infierno al lado de Óscar, aceptar que me fui del país, perder todo lo que tenia yo y solo la perdí... Perdí al amor de mi vida por mi culpa, por no ser cuidadosa.

No me podía mover. Está rígida, triste y herida. ¿Cómo se supone que tome esta noticia? Nunca había perdió a un hijo. Dios, se siente horrible saber que, todo lo que soñaste una vez pensando que lo tendrías en tu brazos..., verlo crecer, a alguien que amar sin importar que o quien ya no existe más... y no hay nada que puedas a hacer.

"En otra vida tendremos a nuestra hija, ¿verdad, Sam?"

De que les gustaría otra historia?