una historia en dónde lucifer morngninstar descubrirá que mientras tenga a los que más ama a su lado nada es imposible y que conocer a alguien más no es tan mala idea como parece
Lucifer se encontraba de la mano de su pequeña buscando alguna casa que estuvieran vendiendo. Que complicado estar en busca de algo y ni siquiera saber por qué calle estás caminando.
Terrible.
Era de mañana y no había mucha gente en la calle a esa hora a lo que le hacía más fácil moverse por los lugares. Y para que Charlie no se cansará decidió que era mejor idea cargarla pues como no traía nada, no fue problema.
Tras 1 hora de estar buscando por fin en una calle donde habían muchas casas hermosas había una en especial que estaba en venta. Para poder tener información sobre su venta lo más sencillo que se le vino en mente fue llamar un teléfono que estaba en el letrero de venta en el jardín de esta.
Saco su teléfono y comenzó a llamar.
Rápido le contestaron.
—hola?
—hola buenos días me comunico con la persona que está vendiendo una casa
—asi es en que puedo servirle
—necesito información sobre la venta
—claro espere un momento
—esta bien
—ahora si, me esperaría un poco esque iré hacia allá
—claro yo lo espero
La persona tras la llamada corto y espero a esta, creyó que tardaría pero no fue haci en poco rato llego un auto. De este se bajó un hombre con un traje azul con negro, cabello negro y ojos azul marino.
—ahora si, déjeme presentarme mi nombre es vox y yo te daré la información sobre la casa
—un gusto conocerlo, y gracias
—puede seguirme por favor
—ya voy —comenzo a caminar tras el
Entraron a la casa y el hombre comenzó a mostrar el interior de la casa contando que la vendería porque se cambiaría a otra y que no planeaba regresar. La casa era una de dos pisos y los cuartos eran grandes, además de que incluía dos baños ya tenía electricidad y agua, lo que más llamo su atención fue un balcón en la habitación principal y el jardín que estaba muy bien cuidado. Pregunto por el precio, el hombre se lo dijo y sin darle más vueltas al asunto la compro. Dijo que sí esa misma tarde el estaba ahí le llevaría los papeles de la propiedad y además le entregaría las llaves.
Se despidieron y se dieron las gracias.
Al hacer esto cuando el hombre volvió a subir a su auto y se fuera se dió la vuelta mirando la casa y después una casa vecina de la que se dió cuenta que alguien lo miraba fijamente con una sonrisa escalofriante.
Decidí solo ignorarlo.
Antes de nada primero Charlie y yo almorzariamos, mi pequeña no se quedaría con hambre.
Lo único que faltaría sería amueblar la casa y comenzar a ambientarla a su gusto. Compraría las cosas que le gustaría a charlie para colocar en su recamara.
Ahora se preguntaba.
"¿En dónde voy a comprar los muebles"
La respuesta es facil, de la misma que compro la casa y esa era buscando por la ciudad.
Cómo aún era de mañana no se preocupo de que se le hiciera tarde. Mucho menos si Charlie se cansaría por qué el se la llevaría cargando.
Y haci siguió con su día ahora buscando un lugar donde vendieran los muebles que necesitaría.
Y la encontró.
Una tienda donde vendían muebles y demás. Al entrar se percató de que está tenía unos muebles demasiado lindos y además de eso que después de comprarlos te daban servicio de que te los llevarán a dónde tú los quisieras. Eso le agrado.
Después de estar escogiendo lo necesario para ya amueblar toda la casa. Que fueron...tres colchones con el mueble para colocarlos y hacer una cama, una sala, un comedor con una cocina, un refrigerador, unas alfombras, televisión con un mueble, dos armarios, un tocador para su habitación, una mesa para la sala, otra para su balcón, cobijas para las camas que incluso su hija escogió una de color rojo y unos cuadros para decorar.
Las personas que lo vieron comprando se preguntaban ¿De dónde saco tanto dinero para comprar todas esas cosas?. No era la primera vez que se cambiaba de casa además de ser de una familia con demasiadas empresas.
Lo ayudaron a llevar todos los muebles y para no tener que hacer varios viajes de ida y vuelta se llevaron una camioneta de traslado, mientras que lucifer tomaba un taxi hacia la casa que ahora era suya.
Al llegar aquellas personas fueron tan amables y pacientes para complacerlo en qué lugares pondrían las cosas que acababan de llevar.
Al terminar de fueron y descanso un poco en su ahora sala, mientras que Charlie estaba mirando la televisión.
—papá me llevarás a conocer la ciudad?
—claro hija pero yo diría que mejor mañana por hoy ya fue demasiado además de que ya es tarde y como no sabemos estar por aquí nos perderíamos y tardaríamos en llegar
—okey papá
—te prometo que mañana hija, ire por nuestras cosas al hotel, ¿Quieres ir?
—no yo quiero quedarme a conocer más la casa
—bien si me tardo y te da sueño tu habitación es la que está al lado de la principal en la planta de arriba
—okey
—ahora regreso
—adios papá
Salí de mi casa y pedí un taxi hacia el hotel en el que me había quedado la noche anterior y haci recoger mis cosas y las de Charlie.
Me dejaron en la entrada y pedi que me esperarán para ir de regreso y no tener que esperar a encargar otro taxi sería bastante tiempo perdido.
Encargue a el portero del lugar que me trajera mis cosas, las bajo y las metí en la cochera del auto con ayuda del chófer. Antes de llegar a casa le pedí al del taxi que se parará en en lugar de comida, compré comida para Charlie yo no tenía hambre. Y ahora sí me llevo a la casa
Al llegar mire a Charlie aún en la sala me acerque a ella y le di un beso en la frente por suerte ella seguía despierta. Le di su comida, espere a que terminara y le dije que se lavara los dientes antes de dormir de todos modos en su cuarto, en el mío y el de visitas habían baños.
Sabía que mi hija solía tener pesadillas muy en frecuencia y que habían noches en las que dormía con ella en precaución de que le diera miedo. Pero este día fue la excepción, Charlie nunca salió y vino a buscarme en busca de calor.
Aproveche que no tenía sueño y salí a el balcón de mi habitación el mismo en el que coloque una mesa con dos sillas, me senté en una y comenzó a meditar sobre mi matrimonio y que fue lo que hize mal.
Sin darme cuenta, comencé a llorar desconsoladamente y esto no termino ahí, sentí la mirada de alguien, era mi vecino que me miraba con una mirada que reflejaba lastima, me limpie sin prestarle mucha atención y volví a entrar a mi habitación.
Segi llorando y sin darme cuenta me quedé dormido en el piso de mi recamara con la cabeza recargada de el vidrio de el balcón.
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