†El Bosque De Las Desgracias†

capítulo 3

A la mañana siguiente lucifer se levantó más temprano para tomar un baño y alistarse no muy formal ya que solo saldría a dejarla y recogerla.
Se dirigió a él cuarto de Charlie y la despertó para que comenzará a alistarse y no fuera a llegar tarde.

Bajo y preparo su desayuno para después darle las buenos días a su hija que ya bajaba con su uniforme puesto y con su mochila cargando para después dejarla en el sofá y dirigirse a el comedor para tomar asiento en su ahora silla.

—estas nerviosa?

—si —asintio 

—no lo estés, te aseguro que te irá bien

—eso espero

—toma, come —decia acercando su plato con hotcakes y un vaso de leche

—gracias, ¿y tú no vas a desayunar aún?

—no hija, no tengo hambre

Charlie comenzó a comer para después irse a lavar los dientes, la mañana paso algo rápido, en un instante ya estaban tomando sus cosas para después salir hacia el auto y comenzar a conducir hacia la escuela.

Llegaron y entro con ella para buscar su salón, no tarde mucho en visualizar el aula que me habían mencionado antes, después de hablar con la maestra dejo a Charlie sin antes despedirse y salir devuelta a su casa.

Cuando llegó decidió ir hacia el jardín y verificar que las plantas estuvieran en condiciones.

Salió con un delantal puesto y una palita con una regadera.

—con que este es el nuevo dueño de la casa del infame de vox

—que? —mire haci arriba encontrándome con un hombre moreno, alto, con cabello castaño, lentes y buen porte

—donde quedaron mis modales, soy Alastor haworth —decia el castaño mientras estiraba la mano. 

—e-eh lucifer morngninstar, en gusto señor alas- —fui interrumpido ya que al pararme y tomar su mano la jalo a el hasta besarla, rápidamente la retire.

-veo que eres tímido cariño

La cara me ardía, no sabía que responder, que le diría, ya no hacía falta pues fue el el que siguió la conversación.

—lamento ponerte incómodo querido, solo te doy la bienvenida

—ya veo, y...¿vives solo?

—si, acabo de mudarme, hace un tiempo vivía con mi madre pero ya decidí seguir con mi vida, y veo que tú no vives solo

—que gran observación alastor

—gracias, entonces el irritante de vox ya no vivirá junto a mi casa que alivio

—veo que no te caía bien

—nunca lo hizo, se la pasaba acosandome y siguiéndome a todos lados. Muy desagradable si me lo preguntas

—pues ya no preguntaré, ya que acabas de contestarme

—bien, entonces veo que tú eres el famoso lucifer morngninstar

—famoso?

—si...eh oido bastantes rumores sobre usted y me encantaría que el verdadero pudiera aclararlos

¿Rumores? Sabía que la gente de una ciudad cuando alguien nuevo llega pueden llegar a crear sus propias perspectivas, pero nunca creí que llegasen a hablar de mí y mucho menos porque no tenía mucho que había llegado, al contrario solo bastaron unos pocos días para que la gente comenzará a hablar de mí.
Será mejor acabar la conversación.