ᴍÍʀᴀᴍᴇ -ʀɪʟᴇʏ x ᴛɴ (ᴏᴍᴇɢᴀᴠᴇʀꜱᴇ)

ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 3

Riley

Hoy parecía un día como cualquier otro, hasta que conocí a Tn Morales. Nunca pensé que alguien pudiera captar mi atención tan rápidamente. Después de nuestro encuentro en el pasillo, no podía dejar de pensar en ella. Su nerviosismo y la forma en que sus ojos brillaban cuando hablaba... había algo especial en ella.

En clase, mientras estaba sentada a su lado, podía sentir que me miraba. Cada vez que nuestras miradas se encontraban, sonreía para mí misma. Había algo en su forma de ser que me hacía sentir tranquila y emocionada al mismo tiempo.

Ella se había presentado a la clase esta mañana y pude notar que toda la clase parecía tener interés en ella, pero no se le acercaban.

Tal vez es porque estoy con ella es decir hace un año entre a esta escuela y en ese entonces tenía 13 y me comportaba muy inmadura y me decían "rarita" aún me lo dicen.

<En la Mente de Riley>

Alegría: ¡Oh, mira cómo nos sonríe Tn! ¡Creo que le caemos bien! -dijo, saltando de emoción.

Tristeza: Espero que no esté sola. Sé lo difícil que es ser nueva en una escuela -murmuró, con un suspiro.

Temor: ¿Y si dicimos algo que le caiga mal? ¿Y si no le gustamos? -dijo, mordisqueando sus uñas.

Desagrado: No se preocupen, chicos. Nos vemos bien hoy. Estoy segura de que no hay nada que pueda salir mal -comentó, revisando nuestro reflejo en un espejo imaginario.

Furia: ¡Si alguien se atreve a ser grosero con ella, tendrán que enfrentarse a nosotros! -gruñó, con fuego en sus ojos.

<Volviendo a Riley>

En el cambio para la segunda clase le hablé a Tn. Le pregunté si le gustaba el hockey. Me dijo que le gusta, pero que no juega. Mi emoción salió a la superficie y le conté sobre las Firehawks.

Mientras hablaba, mencioné a Valentina Ortiz, una alfa deseada por muchas omegas. Es guapa, carismática, amable, y excelente en el hockey. Todo en ella es perfecto.

Soy súper fan de ella. Recuerdo haberme topado con ella como Tn. Me caí al tropezarme con Valentina en mi primer día de clases. Sentí una vergüenza inmensa. Todos me estaban viendo. Me disculpé y me fui.

Aunque sé que preguntarle si es alfa o omega sería incómodo, realmente quería saber. Normalmente, los alfas, involuntariamente, dejan escapar sus feromonas por un momento. Lo sé porque, a veces, en los pasillos, debido a mi sensibilidad a los olores, puedo sentir feromonas fuertes, una característica típica de los alfas. A veces repugno esos olores, ya que no me agradan.

Sería genial si es alfa... ¿no? Qué cosas... Hoy tocaba física, dos horas, y teníamos que ir a cambiarnos. Había dos secciones: alfa y omega. Mis compañeras omegas ya habían entrado al vestidor.

Yo aún tenía que recoger mi uniforme en mi casillero. Normalmente siempre lo traigo en mi mochila, pero lo olvidé la última vez. Mientras abría mi casillero, vi a Tn. Estaba intentando abrir el suyo.

Riley:-¿Problemas con el casillero? -le pregunté, tratando de sonar casual mientras mi corazón latía más rápido.

Tn:- oh, riley si parece que se atascó, quería guardar mi celular y mis audífonos y al intentar abrirla no funciona.- dijo frustrada.

Riley:- mm, esto tiene un truco- me acerque y por abajo del casillero había un estrecho agujero y lo agarre con dos de mis dedos haciendo presiento para que ak jalar habriera. - Vez, jaja, yo igual lo experimenté, algunos casilleros no funcionan correctamente.