—¿Qué haces aquí?—Pregunta Juliana sorprendida cuando se encuentra a su tía en el pasillo.
—Lucia fue a la florería y dijo puras tonterías, pero me preocupé mucho.—Responde Betty.—Por eso vine a verte.
—Pero todo está bien, no tienes de qué preocuparte, ya te lo dije.
—Pero...
—¿Qué?
—No llegaste a dormir. Estuviste con tu abuela. —Replica la mujer mayor. —Yo sé que debería ocuparme de mi propia vida, pero me da miedo que nos distanciemos.
—Tú y yo no podemos estar alejadas. Eres mi única familia, lo sabes.
—Lo sé.
—¿Crees que podría alejarme de ti o tú de mí?—Murmura divertida la morena.
—No, pero me dio mucho miedo. Ya conocer a tu abuela.—Admite Betty con temor.
—No te preocupes, no pienso caer nunca en los juegos sucios de Virginia.
—De acuerdo, super. Bien, entonces, ¿te espero en la noche?¿Llegarás temprano?—Le pregunta.—Vamos a cenar tú y yo solas.¿Está bien? Tenemos que charlar.
—Sí, sí, está bien. ¿Tostamos castañas?
—Claro que sí, mi niña.—Acepta la mujer mayor.—Bueno, entonces ya me voy a ver a una amiga. Te veo en la noche.
—Está bien.
—Bueno, te quiero mucho.
—Yo igual.—Responde Juliana y le lanza un beso. Betty se va y las chicas se acercan a ella.
—¿Qué pasa?—Preguntan ambas al mismo tiempo.
—Vino mi tía. Estaba preocupada por no verme.—Les explica la morena.—Pero yo no me siento nada bien.
—¿Qué tiene?—Replica Viviana.
—Hablé con Valentina.
—¿Y?—La mira expectante Mary.
—No entiende nada, no sabe lo que ocurrió. Y yo le pedí tiempo. Pero solo me dio hasta mañana. Se irá a París esta tarde y regresa mañana.—Contesta Juliana.—Y solo me dio hasta mañana.
—Eso es muy poco tiempo.
—¡Sí!
—Pero tú también trata de entenderla, Juli.—Argumenta Viviana.
—Sé que tiene razón. Le pedí tiempo, que confiara, y ella también me pidió que confiara en ella. Pero ¿Qué voy a decir de aquí a mañana? ¿Qué voy a decirle?
Ambas chicas la miran sin saber que decirle.
—¿Podríamos salir un rato de la oficina a tomar aire?—Propone Mary.
—Yo no puedo, oye...—Responde Juliana y baja un poco la voz.— Tengo que estar más cerca de Virginia. Tengo que aprovechar la oportunidad.
—Claro.
—Tal vez tu puedas ayudarme.
—¿En qué?
—¿Mary?—Cuestiona Viviana confundida.
—El cuaderno rojo.—Les recuerda.—Léelo.
—Está bien, el cuaderno rojo.—Replica la rubia haciendo gesto de guardarlo en su memoria.
—Si lo ves, tienes que salvarlo.—La apoya Viviana.
—Mary, ¿lo vas a hacer?
—Lo haré. Bien, ya me voy.—Dice decidida antes de irse.
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AMOR EN EL AIRE (Adaptación Juliantina)
FanfictionTras perder a sus padres cuando era muy joven, Juliana consiguió seguir adelante en sus estudios gracias a las becas. Al finalizar sus estudios , planeaba viajar al extranjero para completar su formación en la universidad, pero la aparición en su vi...