CAPITULO 34

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-Ahora estará en contacto con Juliana- Le informa Val a Ana.

-Encantada.-Replica la mujer estrechando su mano con la morena.

-Nos vemos- dice Juliana y cuando terminan de despedirse , comienzan a caminar hacia el carro.

-¿Cómo estuve? ¿Fui profesional?-Pregunta Juliana en un susurro, el ver qué están a algunos metros alejadas de la mujer.

-Parecías una novata

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-Parecías una novata.-Responde Valentina con sinceridad.

-¿En serio?-Vuelve a preguntar apenada.

-Entusiasmada, sin saber qué decir.

-Entiendo.

-Pero, por otro lado, parecías una persona muy inteligente, segura y confiada.

-¿En serio?

-Ajá, No te preocupes, puedes hacer este trabajo-Le asegura , para luego sacar su teléfono y llamar a Leila

-Hola, ¿señorita Valentina?-Responde la chica atendiendo la llamada.

-Leila, ya terminamos aquí. ¿Me envías el resto de mis citas?

-El señor Santiago me dijo que le llevaría mucho tiempo, así que no porgramé nada para hoy.

-Recién son las tres, Leila.

-Sí, señorita Valentina

-Uff, Leila, no vuelvas a cancelar mis citas si no te lo pido yo.-Dice Valentina evitando sonar molesta.

-Está bien, señorita Valentina,Lo siento.- Responde Leila , la castaña finaliza la llamada sin responder

-¿Quieres ver dónde haremos la marina?

-Sí, quizá me inspire-Responde la morena con una sonrisa.

-Pensaba que las hadas no necesitaban inspiración.- Murmura Valentina en voz baja.

-¿Qué dijiste?

-Una tontería, olvídalo, No importa, vamos- Replica comenzando a caminar.

Ambas caminan hacia el otro lado del terreno a uno desde dónde se puede ver el océano y específicamente el área donde construirán la marina.

-Es hermoso, ¿no?-Pregunta Valentina deteniéndose.

-Sí, es hermoso.

-Mira, vamos a construir la marina aquí.

-Dice señalando una estructura dentro del mar.

-¿No es raro? Es un terreno muy grande. Tú sueñas con un proyecto y lo haces realidad. Como un artista cuando pinta un cuadro.

-De hecho, esa es mi parte favorita, la etapa de diseño- Responde Val con sinceridad. -De niños siempre veníamos a nadar aquí, Nuestros padres ni se enteraban, Santiago, Luis y yo, no la pasábamos de maravilla.

AMOR EN EL AIRE (Adaptación Juliantina)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora