El hermanito perfecto (MinSung)

Capitulo 3.

El pelinegro había sido completamente obligado a llegar temprano a su casa, su madre casi moría de un infarto cuando vio su mano toda enrojecida y herida.

—¡Aún no entiendo como diablos de hiciste esto, Lee Minho! —Se quejaba su madre mientras envolvía su herida.

—Fue un accidente, ¿de acuerdo? —No había querido contarle muy a detalle lo que había ocurrido a su madre, como le diría ¿que solo había hecho eso por un frenesí de enojo?

—Justo hoy, cuando vas a conocer a tu padrastro y su hijo —Minho puso los ojos en blanco pero luego lo pensó, ¿un hijo? Se había sorprendido ante aquello, había omitido ese detalle debido a que no quería escuchar hablar sobre ese tema con su madre.

Luego lo recordó, tenía que compartir habitación ahora con aquel mocoso debido a que por ahora no podrían mudarse a un lugar más grande y la casa del susodicho estaba a nombre de ex esposa así que la señora Lee no quería casuar más problemas.

Su madre terminó de limpiarle sus manos  y seguido de ello escuchó el timbre sonar, casi sale volando a abrir la puerta para encontrarse con aquel hombre que en su mente era tan desagradable.

***

El padre de Jisung había abrazado a aquella señora y el sólo se limitó a mirar a otro lado guardándose las ganas de reclamarle a su padre.

La señora lo miro y el sólo realizó una reverencia, lo que no esperaba era que aquella señora posaria una mano sobre su cabello acariciando de este con suavidad, levantó la cabeza mirando a la perfección cada rasgo de la mujer con la boca levemente abierta... ella se parecía a...

Sus ideas se apagaron cuando ella se alejó invitandolos para pasar su hogar ... mejor dicho su ahora hogar.

Con cuidado se adentró a la casa sentándose a un extremo de su padre en el sofá mirando a su nuevo "hermano" con curiosidad.

Lo sabía, esa señora se parecía a Lee Minho, por que ella era su madre

—Minho, cariño, ven a presentarte —El nombrado estaba en completo shock al ver al chico más inteligente de su instituto parado frente a él.

Su madre parecía absolutamente feliz admirando aquella escena, mientras que el quería que la tierra se lo tragase.

Se levantó del sofá con cuidado y saludó a las personas presentes con una pequeña reverencia, nunca pensó que aquello terminaría así.

La madre de Minho chilló abrazándose al brazo de aquel hombre al cual  continuaba considerando desagradable.

—Nuestros pequeños juntos, espero que ambos se lleven muy bien —Pronunció la mujer con felicidad, el pelinegro seguía sin pronunciar palabra alguna.

— Y así será cariño — Jisung miro a su padre. Este  había respondido dejando un beso en la mejilla de aquella mujer, el menor se dedicó a jugar con sus dedos de vez en cuando pensando si sería la mejor opción quedarse o irse a vivir con su madre para dejar a su padre ser feliz —  presentate cariño — la voz de su padre llamo su atención, asintió mirando a todos con una pequeña sonrisa

— Buenas tardes señora, buenas tardes —  se dirigió a aquel chico que aún sabiendo su nombre por como era su relación sólo se limitó a decirle esas palabras —  mi nombre es Jisung... Han Jisung espero llevarme bien con usted señora —  Jisung miro a su padre rogandole con los ojos que lo sacará de esta situación.

Minho apenas pudo salir del trance en el que estaba y asintió ante las palabras del menor.

—Soy Minho —Se presento de igual forma, a pesar de que conocía al contrario quizás iba más dirigido a su padrastro.

— Joven Minho podría acompañar  a Jisung para que conozca su habitación y de nuevo lamento causar molestias —

Minho asintió nuevamente y con una sonrisa forzada invitó a Jisung  a subir y conocer su nueva habitación.

Habitación que compartirían.

Minho no sabía como se sentía, era una mezcla de irritación y paz, quizás era mejor que cualquier otro chico desagradable se presentara en su casa, Jisung era la mejor opción sin duda