CAPÍTULO 8: ELLOS NO SON LO QUE APARENTAN.
"El mundo es un bello libro, aunque inútil para los que no saben leerlo."
- Carlo Goldoni
Nos tenían acorralados y cada vez, se acercaban más.
Otro disparo proveniente de la pistola de Mason se escuchó. Esta vez, atinó la bala en el pecho de una de esas cosas, dándonos camino libre.
-¡¡¡Corran!!!- nos gritó Mason
Y sin esperar otra palabra suya que pudiera salir de su boca, Coleta y yo nos encontrábamos corriendo hacia la puerta trasera, por la que entramos.
Segundos después de haber llegado a la oficina, Mason entró aun con la pistola en la mano, jadeando. Salimos del cuarto y saltamos la reja. Antes de que yo pudiera estar en el otro extremo, donde ya se encontraba Coleta; Un gruñido acompañado al rato de más, inundó el ambiente. Al voltear mi mirada, me encontré con la misma manada de esas cosas, atrás de nosotros.
- ¡¡¡Vamos Ginn!!!- me apresuró Coleta
Sin repelar más, di un gran salto, para que terminara cayendo de pie en el asfalto. Mason siguió después de mí y antes de que esas cosas lo alcanzaran, ya se encontraba saltando hacia afuera.
Nos quedamos pasmados, esas cosas trataban de venir hacia nosotros, pero la reja les impedía el paso, por lo que, lo único que podían sacar eran sus brazos.
- Ya, larguémonos de aquí. Soltó Coleta con voz entre cortada.
Regresamos como igualmente fuimos, silenciosos. Esas cosas habían quedado atrás, pero aún tenía la psicosis de que al final uno de esos me aparecería por detrás, por lo que cada minuto me volteaba para comprobar.
A lo lejos divisé el letrero del mini- super. Sin más nos apresuramos hacia él. Coleta entró primero y después yo le seguí.
Mis abuelos que se encontraban inspeccionado el lugar, al oír la puerta del mini-súper abrirse se voltearon a nuestro encuentro. Mi abuela peló los ojos y se aproximó hacia mí, ella acunó mi rostro y acto segundo llevó su mano a mi manga lateral de la sudadera , en ella se encontraba un hoyo y un deje de sangre.
-¡¿Qué pasó?!- preguntó la abuela mirando alterada a Coleta y Mason
Ellos pelaron los ojos. El abuelo mientras, ya se encontraba cerca de nosotros. Llevé mis dedos a el hoyo al abrirlo me percaté que era un rasguño.
-Tal vez me lastimé al trepar en la reja. Les dije a Coleta y a Mason.
No dolía, a decir verdad ni me di cuenta de ello.
-¿Cómo que al trepar en la reja?- a hora el abuelo era el que hacia preguntas
Miré a Coleta y ella miró a Mason. El carraspeó un poco.
-Trepamos por una reja, ya que la puerta principal no se me hacía muy confiable. Empezó el
- Si, al salir esas cosas salieron. Terminó Coleta
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El Último de Todos (sin editar)|Pausada|
Fantascienza|He decidido pausarla. Siento que necesita muchas correcciones y ahora estoy con otra historia. Pero por favor no la quiten de su biblioteca| EL mundo ya no es de los vivos. Un virus se expandió por todo el mundo, haciendo que las pers...