𝑾𝒂𝒓 𝒐𝒇 𝒉𝒆𝒂𝒓𝒕𝒔; 𝑱𝒂𝒄𝒂𝒆𝒓𝒚𝒔 𝑽𝒆𝒍𝒂𝒓𝒚𝒐𝒏¹

09; Biblioteca

Estaban en la cena, Lynaessa había tomado algo de confianza pero aún no se acercaba o hablaba con nadie que no fuera Baela, su repentina amistad los sorprendía a todos y a algunos los aterraba, Daemon, era una de esos, sentía que la Hightower tramaba algo y por eso solamente se acercaba a su hija.

Daemon veía a ambas chicas que compartían miradas como comunicándose entre ellas, Baela parecía impaciente e insistente con algo y Lynaessa por su parte negaba y la miraba para que dejé de insistir, pero le frustraba no saber qué querían decir con las miradas.

—Jace... —habló Baela y la chica frente a ella empezó a negar con desesperación para que parase—¿No crees que deberías pasar algo de tiempo con tu prometida? —pregunto cuando tenía la atención del mayor de los Velaryon.

—He...—dijo mirando a Lynaessa que miraba su plato casi vacío y luego a Daemon quien asintió con la cabeza, esa era su oportunidad—Si, solamente que como siempre estas con ella y nunca la encuentro sola es medio difícil acercarse.

—Bueno a Lyna le encanta leer e iba a enseñarle la biblioteca pero puedes hacerlo tú, así se van conociendo un poco más. —dice la chica con una sonrisa, su plan era que se acerquen y así volver a ser como eran antes.

Al escuchar la palabra "biblioteca" su mente viajó hacía la charla con Daemon y se puso nervioso empezando a balbucear, hasta que se aclaró la garganta y actuó con naturalidad.

—Es una buena idea, ¿Usted qué opina, princesa Lynaessa? —preguntó el Velaryon mayor viendo a su prometida.

—Mhm, es una buena idea. —respondió ella viendo de mala manera a la morena frente a ella.

—Entonces... —se levantó y estiró su mano hacía ella—¿Le gustaría ir ahora princesa? —le sonrió genuinamente hacía ella.

Lyna buscó en la mirada de Ser Jered su aprobación y cuando la obtuvo, tomó la mano de Jacaerys, su tacto era cálido a diferencia de ella que siempre tenía las manos heladas, se levantó.

—Que tengan buena noche. —les dijo a todos en la mesa antes de irse junto al príncipe.

Salieron de allí con Ser Jered detrás de ellos, ella se dio vuelta y le dio una mirada de que podía ir a descansar, él al entender hizo una reverencia y se fue para dejarlos solos.

—Tiene las manos frías princesa. —le dijo Jace haciendo que ella se diera cuenta que no lo había soltado.

—He, si, lo siento príncipe Jacaerys. —se disculpó soltando su mano rápidamente.

—No me molesta Lynae... disculpé, princesa. —hablo al darse cuenta que la estaba tuiteando.

Se quedaron en silencio y Jacaerys abrió la puerta de la biblioteca, Lynaessa miró todo con atención no se comparaba a la biblioteca de la fortaleza roja pero era grande y muy bonita.