El tercero en actuar fue Jimin, quien era el encargado de estar pendiente del personal; de quien se iba, quien llegaba, quien hacia mal su trabajo o si alguien habia robado algo dentro de la mansión. Este puesto era muy importante en la casa, pues todas las personas que trabajan ahí, le tenían un gran respeto a Jimin, ya que a pesar de verse tierno y buena persona, Jimin era estricto, haciendo que todo marchara a la perfección y así lograr ganarse a todos. Los hombres veían a Jimin como un ejemplo a seguir y las mujeres lo veían como un ícono de belleza y admiración, hasta el punto de quedar totalmente enamoradas de su carisma.
Ese mismo día, Taehyung había decidido echar a una de las mujeres más ancianas del lugar, una de las pocas damas que había logrado sobrevivir largos años en aquella mansión, sin ser lastimadas, solo usadas como juguetes sexuales, entregándole a Taehyung su juventud. El rubio quería deshacerse de ella lo más rápido posible, sin darle ni un solo Won a cambio por su arduo trabajo, por lo que decidió acusarla de robo, guardando en su bolsa mucho dinero.
—Me temo que debo dejarlo solo. -dijo la anciana con voz cansada.
—No se preocupe, mis amigos están aquí, no me pasará nada malo. —respondió Jimin con una sonrisa dulce.
—Debes tener mucho cuidado joven, el señor guarda un don muy poderoso y si se descuidan, puede utilizarlo en su contra. —informó la anciana en un susurro.
Jimin se quedó pensativo por un momento, tratando de ingerir las palabras que le había dicho la anciana ¿Un don? ¿Algo peligroso? ¿Qué podría guardar Taehyung aparte de su locura? Realmente no tenía sentido, pero para alguien que llevaba tanto tiempo ahí, era más que claro entender que ella sabía mucho mas cosas que ellos que llevaban un par de meses. Después de olvidar un poco el tema, Jimin se dispuso a acompañar a la anciana hasta la puerta donde Taehyung ya se encontraba esperando, con dos policías a cada lado.
La anciana no entendía lo que estaba pasando, pero cuando los policías tomaron su bolsa y encontraron dinero en ella, rápidamente entendió que le habían tendido una trampa, una trampa para no pagarle todo el dinero que merecía por estar ahí más de 40 años. A pesar de sus explicaciones, a pesar de sus lágrimas y ruegos, la anciana fue traslada a una carcel local, dónde pasaría los últimos años de su vida, siendo condenada injustamente. Esas fueron las palabras que Jimin utilizó para poner a los demás trabajadores de su lado, ya que ellos habían visto lo sucedido y estaban decididos a no pasar por lo mismo, pues no querían ni morir, ni terminar en la cárcel.
—Sé que están asustados, sé que no quieren tener problemas con Taehyung —susurró Jimin—, pero no podemos continuar de brazos cruzados viendo como desaparecen nuestros compañeros o son condenados a estar en una cárcel siendo inocentes.
—¿Qué debemos hacer? —preguntó una joven de tan solo 20 años, la cual se veía asustada y arrepentida de haber aceptado el puesto.
—Por el momento nada, solo estar atentos a lo que suceda, ya que sus palabras, serán clave para nuestro plan. —aseguró Jimin.
Todos habían aceptado trabajar con Jimin, ya que estaban cansados de ver cómo todo sucedia sin explicación, solo por deseo del rubio. Una vez que todos volvieron a sus puestos de trabajo, Jimin se dispuso a contratar a una nueva chica, la cual cubriría el puesto de la anciana, lo cual no fue difícil, pues muchas chicas querían trabajar en la mansión que le pertenecía al príncipe de la moda y también, querían ser parte del personal del rubio, pues muchas mujeres, soñaban con tenerlo en su cama aunque fuera una sola vez.
La noche había llegado rápidamente, por lo que Jimin se dispuso a ir a su habitación junto con Yoongi, quien debería estar preocupado, pues no sé había podido ver con sus amigos en todo el día. Mientras Jimin pasaba por la habitación de Taehyung, escuchó unos gemidos agudos, los cuáles provenían de la chica de hace un momento, la que tan solo tenía 20 años y al parecer, había caído bajo el encanto de Taehyung, algo que atemorizaba a Jimin, pues si ella decía algo respecto a lo que habia hablado, probablemente todo sus planes caerian.
—Ah, Taehyung ¡Hazlo más rápido! —gritó la chica.
—Dios, que rico. —suspiró el rubio— ¿Te gustaría ser mía para siempre?
—¡Sí, me encantaría!
Jimin observaba por la puerta semi abierta, tratando de controlar la situación, ya que si ella se atrevía a decir algo, el entraría a interrumpir todo, con la excusa de que se había equivocado de habitación. La chica estaba amarrada, tanto sus piernas como sus brazos, todo al cuerpo, impidiendo que se moviera, solo estaba al Merced de Taehyung. El rubio la volteo boca arriba, poniendo sus piernas de lado, logrando penetrarla sin problema y mientras hacía esto, Taehyung sacó una navaja de debajo de la almohada, cortando el cuello de la chica de par en par, para luego salir de ella, tomar una cuerda y colgarla del techo, haciendo que esta se desangrara sin poder hacer nada.
—Ahora serás mía para siempre.
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My Ghost
FanfictionKim Namjoon es dueño de una morgue, la cual decidió fundar después de sucesos paranormales que ocurrieron en su infancia, los cuales sucedían debido a su poder misterioso, poder que está decidido a ignorar. Kim Seok Jin, más conocido como el prínci...