Que pasaría si...-Pedri y Gavi

18. Un respiro antes del partido

Al final me había levantado yo antes que Marco y estaba yendo a mi habitación para ducharme y quitarme el aspecto asqueroso de haber salido de fiesta antes de que Pablo se despertara.

Obviamente no iba a despertar al pobre Marco por que era aun muy pronto para que el se despertara para el trabajo pero le dejar una nota dándole las gracias y con mi numero por si quería quedar algún día ya que nos habíamos llevado bien.

Estaba saliendo de la ducha cuando Pablo se despertó.

–Buenos días Pablito–dije mientras salía del baño.

–Buenos días– dijo adormilado– ¿A que hora has vuelto?

–Hace como 15 minutos.

–Pues espero que hayas dormido bien, porque el entrenamiento que nos espera es jodido.

Joder, es verdad, mañana era el primer partido y hoy era entrenamiento duro y yo estaba demacrado.

–Madre mía, nos van a matar a ejercicios–le dije quejándome–Metete a la ducha rápido y así te espero para ir a desayunar.

Mientras Pablo se duchaba revise mi móvil, tenía varios mensajes, unos cuantos del grupo que tenía con Ferran y Sara y otro de un número desconocido.

Cuando vi que era Marco le agregue y me alegro que me dijera que él también quería quedar conmigo.

Después de hablar con él mire los mensajes del grupo, básicamente Ferran y Sara con mucha resaca.

Cuando Pablo salió del baño nos fuimos a desayunar.

–Madre mía Ferran que careto, que hiciste ayer?–dijo Gavi al ver a mi amigo.

Me tenía preocupado por si a Ferran se le escapaba algo sobre la locura de anoche.

–Nada, una mala noche–dijo sin abrir los ojos y apoyando la cabeza en las manos.

Después del desayuno nos fuimos a entrenar y fue el peor entrenamiento de mi vida, entre los nervios y los ejercicios acabé muerto.

Preferí ir a la habitación a ducharme mientras Gavi se duchaba en los vestuarios para después ir a comer.

Al salir de la ducha recibí un mensaje de Pablo diciéndome que iba directamente al comedor, a lo que yo respondí que iba a tardar un poco en bajar mientras me tumbaba en la cama.

Sorpresa, me quedé dormido.

Eran las tres y me desperté con el ruido de la puerta, era Pablo entrando.

–Hola bella durmiente–dijo sonriendo.

–Madre mía, estoy muerto–dije tapándome los ojos de la luz

–Deberías bajar a comer algo antes de que cierren todo–dijo él mientras recogía algo de ropa.

–¿A donde vas?–dije confuso, sabía que no le gustaba hacer cosas antes de los partidos.

Normalmente después del entrenamiento y de comer vemos alguna película ya que casi siempre nos daban la tarde de antes de los partidos libre para "relajarnos".

–Voy a pasar la tarde con Dani, que no quiero pasar la noche fuera–dijo mientras cogía la cartera y el móvil–Supongo que veremos algunas películas.

–Bueno pues yo bajaré a comer algo–dije saliendo de la cama–Chao

–Adiós–se despidió mientras cerraba la puerta

Me vestí, me lavé la cara y salí rumbo al comedor.

Después de que los del restaurante casi se negaran a servirme por la hora, terminé de comer, solo, literalmente solo había un par de cocineros y yo en el comedor.