Oscuro Deseo

Capitulo 8. Amor prohibido

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Narrador omnisciente ( :
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Después de una larga noche con Konrad, Hailey está pensando en todo lo que pasó y cómo pudo dejarse llevar por los impulsos del deseo.

¿Cómo pudo besar a Konrad? ¿Cómo pudo hacer todo eso con él? Ella nunca había besado a otro hombre antes, solo había estado con Liam. Para ella, esto era malo, porque no se imaginó que podrían llegar a un beso.

Para Hailey, que Konrad sintiera interés por ella era muy extraño, pero no le prestó mucha atención. Ella creyó en él solo después de haber pasado una noche en un hermoso mirador al que él nunca llevaba a otras chicas. Siempre iba allí a meditar y estar solo.

Lo que Hailey no sabía es que todo era parte de un plan. Konrad no era ningún tonto; ya tenía experiencia en la seducción y quería que Hailey cometiera un solo error. Pensó que eso le tomaría días, semanas o quizás años. Sin embargo, no esperaba que ella le revelara todo con un solo beso, que para él no significó nada en absoluto.

Para él, fue solo deseo y placer; se dejó llevar por la lujuria.

¿Cómo Konrad podía jugar tanto con la mente de una persona hasta el grado de hacerle contar sus secretos más profundos? ¿Cómo podía aprovecharse así de Hailey, una persona tan inocente que no conoce bien la maldad que hay en el mundo? Y él, aún sabiendo todo lo que ella ha pasado, se iba a aprovechar sin importar el dolor que ella sintiera en ese momento.

Pero al contrario para Hailey, ese beso fue algo completamente diferente. Nunca había experimentado algo así. Aunque le gustaba físicamente Konrad, no quería admitirlo, porque para ella eso estaba mal.

Konrad sabía que seducir a Hailey le daría lo que quería: más poder en la empresa. No había espacio para el amor en su mente; solo quería más y más poder. Si para eso tenía que destruir a Hailey, lo haría. Sabía que el padre de Hailey tenía más empresas, pero no vio necesario quitárselas. Al contrario, pensaba que si ganaba al padre de Hailey, podría incluso llegar a estar dentro de sus empresas.

Con todo el poder que tendría cuando se casara con Greta, él estaba satisfecho por todo lo que había logrado.

Sin embargo, no podía evitar preguntarse qué pasaría si llegara a enamorarse…

Konrad estaba entablando una conversación con Hailey por mensaje para quedar en verse en la noche.

—°Nos vemos en la noche para cenar; quiero llevarte a un lugar.°

Hailey tardó en responder; no quería verse desesperada.

—•“Está bien.”•

Konrad no era tonto; sabía que esa respuesta de Hailey era para evitar lo que había pasado ayer. Pero eso no detuvo a Konrad, sino al contrario; eso lo motivó aún más a escribirle descaradamente.

—°¿Por qué esa respuesta tan seca? ¿Quieres que vaya y te moje un poquito?°

Esa respuesta hizo que Hailey se sonrojara y se sintiera como una tonta por lo que había hecho con él en ese mirador.

—•“Tú sí eres un atrevido descarado.”•

Konrad se rió mientras estaba en su oficina, y su amigo Derek lo vio.

—“Te estás riendo. No pensé que tú, amigo mío, fueras una persona que se riera. La verdad, siempre eres un gruñón.”

En eso, Konrad dejó su teléfono a un lado para ver a su amigo con una mirada de advertencia.