Amor eterno [Axl Rose]

09. Más sorpresas inesperadas

Paris bajó del taxi con una maleta en su mano izquierda y una transportadora en la mano derecha. Dió un suspiro, y se adentró en el aereopuerto.
Sentía nervios, sería la primera vez que viajaría con el equipo. Y el hecho de que tenía que ponerse en contacto con Axl por el tema de los gatos, la ponía aún más ansiosa.

-Hey-Saludó Stefanny, con una sonrisa al verla.

-Hola.-Sonrió, pero rápidamente cambió a una cara de asombro al ver que el avión tenía el logo de la banda.-¿Es avión privado?

-Claro. ¿Pensaste que nos iríamos en un avión normal?

-Pues...

-¡Paris!-Beta sonrió en grande. Luego miró a Stefanny. -Oh, hola a las dos.

Stefanny dió un asentimiento de cabeza y Paris miró a Beta a los ojos.

-¿Traes a tu gatito?-Paris alzó la mano con la transportadora.-Oh, perfecto. Escucha, Axl aún no ha llegado, se quedó dormido.-Beta soltó una risita. Paris lo agradeció mentalmente.-Pero si quieres ven conmigo, yo te acompaño hacia donde lo tienes que dejar.

-Está bien.-Dijo Paris, y miró a su amiga Stefanny.-Ya vuelvo.-Dió unos pasos y luego se giró.-Por cierto, ¿Dónde está Marco?

-Me dijo que ya venía en carretera, en 5 minutos viene.

Paris asintió y siguió su camino detrás de Beta.
La mujer la dirigió hacia otro avión, notablemente más pequeño. Al entrar pudo ver a algunas personas, como Duff, Slash (y una mujer pelinegra a su lado), a una chica con dos coletas de color azul (de la cuál no recordaba el nombre) Dizzy, Richard y Frank, al igual que Fernando, Vanessa y otro chico desconocido para ella.
Al parecer era un avión grande para todos los empleados y un avión pequeño para los artistas y sus familias.

Beta la dirigió hacia el fondo, donde había un lugar con cajas de arena, camitas, croquetas y jaulas, y dentro de éstas se encontraban dos felinos.

-Estos son los gatos de Axl.-Le explicó Beta.-Y ella-Señaló a una mujer de aproximadamente 30 años.-Es Erika, la veterinaria.

-Un gusto.-Paris le extendió la mano y Erika la estrechó con una sonrisa. En ese momento, el celular de Beta sonó.

-Disculpen.-Dijo saliendo por la puerta para ir a contestar a otra zona del avión, dejando a Paris y a Erika a solas.

-Puedes ir poniendo a tu gatito por aquí.-Erika le hizo un espacio y Paris colocó la transportadora allí.-¿Cómo se llama?

-Tommy.

-¿Solo Tommy?

-Eh... Sí.-Respondió Paris, un tanto confundida por la pregunta.

-Ah, perdona, linda-Erika se rió.-Estoy acostumbrada a los gatos con apellidos.

-¿Apellidos?-Paris alzó las cejas, sorprendida.

-Sí. Verás. Este se llama Dexter Maranello Rose, y este otro es Dijon Rose.-Dijo Erika, mostrándole ambos gatos, que eran prácticamente iguales.

-Ohhh... ¿El señor Axl Rose les puso su apellido a sus gatos?-Preguntó Paris, con cierta ternura.

-No solo son sus gatos, para él son como sus hijos.

-Me imagino que sus hijos humanos deben estar celosos.-Sonrió Paris, observando a sus felinos.

-Axl no tiene hijos humanos.-Dijo Erika, con una cara muy seria.

-¿No?-Preguntó Paris, extrañada.

-No, de hecho él es soltero.

-¿El señor Axl Rose es soltero?-Preguntó con todavía más extrañeza.-Supuse que, por su edad, él tendría una familia.