Narrador Omnisciente
Sara ahora se dirige hacia su penthouse, en donde la espera su hijo. El día de hoy, Luciana y ella quedaron en almorzar junto a sus hijos para ponerse al día con todo lo que ha pasado.
Baja del auto y sube al ascensor, apresurada. Abre la puerta del penthouse esperando ver a su hijo vestido y arreglado como le había ordenado, pero al estar todo en silencio, una pequeña sonrisa de forma en su rostro.
-¿Dónde estará Chris? -habla sola mientras deja su bolso en el comedor.
-¿Estará aquí? -mira detrás del sofá- ¿O aquí? -abre la puerta del baño de visitas que se encuentra en la primera planta.
Sube las escaleras con sumo silencio y entrecierra los ojos al ver una pequeña corbata en el suelo.
-¿Christopheer? -abre la puerta de las dos habitaciones principales y tampoco está su hijo.
Sonrie en grande al abrir la puerta de su última opción. La sala de juegos.
-¿Dónde estará Christopher? -se queda parada en medio de la habitación con las manos en la cintura.
-¡Ajá! -grita cuando lo ve salir detrás de un mueble y corre por el pasillo.
Aún con tacones, Sara corre por toda la casa persiguiendo a su hijo.
-¡Te atrapé, pequeño demonio!
-¡No! - Christopher ríe a carcajadas con las cosquillas que su madre le brinda en el cuello y estómago.
-¡Tienes que vestirte! ¿Por qué no tienes puesto tu traje? -toma a su hijo en brazos y envuelve sus piernas en su cadera.
-¡Ese traje es incómodo! -refunfuña con un tierno puchero.
-Pero si no te lo pones, te verás como un niño pobre. ¿Acaso quieres verte pobre y sin dinero? -habla Sara con una gran sonrisa mientras le acaricia el cabello.
-¡Yo no soy un niño pobre! -exclama con el ceño fruncido.
-Entonces, ponte tu traje y salgamos, vamos a almorzar con mi amiga y tú vas a jugar con Rachel, seguro se llevarán genial. -camina hacia la habitación.
-¿Quién es Rachel? -la curiosidad apoderándose de su rostro.
-Es la hija de mi amiga, Luciana. -una gran o se formó en los labios del pequeño niño y con tranquilidad dejó que su mamá lo vistiera.
-Te ves guapísimo, mi amor.
-Ya lo sé. -dijo orgulloso, ganándose una risa por parte de su madre y un beso en la frente.
-Vamos, de seguro Luci ya está esperando.
***
-¿Podré comer helado? -preguntó Christopher cuando bajaron del auto.
-Si acabas tu comida, sí.
Ambos caminaron entre mesas por todo el espacio, no era un local, este restaurante tenía mesas y sillas con sombrillas al aire libre, sin dejar de lado el aire sofisticado, moderno y lujoso.
-¡Sara! -Luciana alzó la mano desde su asiento.
La mujer caminó de la mano de su hijo hasta enconrrarse con su mejor amiga, apenas estuvieron frente a frente, se envolvieron en un gran abrazo, mientras que sus hijos, no dejaban de mirarse el uno al otro.
Rachel parecía estatua, viendo los ojos grises tan brillantes como una estrella, la cortina espesa de pestañas que cubrían estos y el ceño fruncido lleno de curiosidad y seriedad, la profundidad de su mirada la estaba haciendo sentir cada vez más pequeña, pero aún así no se iba a dejar amedrentar ante él .
Christopher, por otro lado, estaba embelesado con los dos zafiros que la niña frente a él tenía, la piel cremosa y el cabello azabache cayendo en ondas por sus hombros la hacían ver como una auténtica muñeca. —o mejor dicho, un ser de otro mundo—
Rachel.
—Chris, ella es Rachel. —dice la amiga de mamá.
El niño frente a mí parece ser un poco —mucho— más alto que yo, su ceño está freuncido, o eso es lo que dice papá cuando alguien está molesto u incómodo, fruencen el ceño.
—Hola. —susurro con una pequeña sonrisa.
Quisiera decir que también me saluda, o que me dió la mano a modo de saludo, pero no, SE ENCOGIÓ DE HOMBROS Y SE SENTÓ EN LA SILLA FRENTE A MÍ.
—Christopher, no seas mal educado. —regaña tía Sara.
El niño, —el cual su nombre, ahora sé que es Christopher— suelta un bufido y se limita a murmurar un hola muy bajo.
Mamá niega con la cabeza en silencio e invita a su amiga a sentarse.
Christopher.
No levanto la mirada de la ensalada mientras la como, mamá y su amiga —la cual no me cae nada bien— están hablando sobre cosas a las que no les presto atención, mientras que la niña frente a mí no deja de comer sin parar de mirar nuestro entorno.
Esa mocosa me va a matar.
Cuando la vi mi corazón se aceleró demasiado, incluso sentí que en algún momento se iba a salir de mi pecho, fue muy extraño, y estoy seguro de que la niña esa tuvo algo que ver.
Es una bruja.
Estiro el brazo para agarrar el embase de sal que acaba de dejar Rachel en la mesa, agito el bote encima de mi comida y de un momento a otro, la tapa de este se cae, llenando de sal todo el plato.
La risa malévola de la niña frente a mí no se hace esperar y suelto un gruñido lleno de rabia, la muy cínica se agarra la panza de tanto reír y creo que hasta lágrimas se le salen.
—¡Rachel! ¿Cómo pudiste hacer eso? —se calla de repente al oír la voz de su madre, ojalá la castigue.
—¡Se lo merece, es un mal educado! —grita y pone roja de rabia mientras se cruza de brazos.
—Tranquila, Luci, son niños y siempre hacen travesuras entre ellos. —aboga mamá por la loca.
Rachel.
Luego de que el niño mal educado volviera a comer un nuevo plato de comida, vinimos al parque, desde su sitio me lanza miradas malvadas y le regalo mi mejor sonrisa.
No me arrepiento de nada, al contrario, se merecía que llenara toda su comida de sal, así que tomé el embase y disimuladamente le aflojé la tapa, para luego dejarlo frente a él, no fue muy dificil deducir que le gusta la ensalada con mucho condimento, a cada rato estaba tomando el bote para agregarle más y más.
—Niños, vayan a jugar mientras nosotras conversamos, no se alejen mucho. —habla la tía Sara.
—Sí, ma. —me sorprendo cuando Christopher toma mi mano y me jala hacia los toboganes.
Me encojo de hombros y subo la escalera de este, sintiendo que él me sigue.
Sin mirar hacia abajo me siento y deslizo por este.
Pego un sonoro grito cuando veo que en el suelo me espera un enorme charco de lodo, estiro mis brazos y piernas, quedando enganchada al tobogán mientras escucho las carcajadas del hijo de Sara tras de mí.
¡ESE NIÑO ES UN DEMONIO, ESO ES!
♡♡♡
NOTA
Hello, he estado desaparecida pero volví con la parte tres y última de este one shot.
Recuerden que será un futuro fanfic chrischel pero aproveché esta oportunidad para promocionarlo. ✨️
Los lunes habrá actualización en estos one shots. 🌷
Espero que les haya gustado. 🫶
No se olviden de votar y dejar sus comentarios, me gusta mucho leerlos. 💌
Con amor. 💙
Deyri. 🩶
ESTÁS LEYENDO
𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒 𝐃𝐄 𝐏𝐄𝐂𝐀𝐃𝐎𝐒 𝐏𝐋𝐀𝐂𝐄𝐍𝐓𝐄𝐑𝐎𝐒
Hayran KurguPEQUEÑO APARTADO PARA ONE SHOTS SOBRE PECADOS PLACENTEROS. LOS PERSONAJES NO SON MÍOS, SON DE EVA MUÑOZ Y SU TRIOLOGÍA. LASCIVIA LUJURIA DESEO